martes, 28 de enero de 2014

“Pobres magnates” de Thomas Frank

Empiezo a escribir esto cuando acaba de hacerse público que el gobierno se propone restringir el aborto a casos de violación o cuando esté en riesgo la salud de la mujer. Ya no les tiembla la mano, a los hijos de puta. La verdad es que parece que hemos llegado a un punto en el que ya a nadie le tiembla la mano por nada. Un día es el tarifazo de las eléctricas, el anterior la ley de seguridad ciudadana o cómo cerrarle la boca a quienes discrepan; no mucho antes se cuestiona el derecho a la huelga, se cercenan los derechos laborales, se privatiza la sanidad. Y todo eso se hace mientras se roba, mientras se miente, mientras se prostituye la justicia. Y no pasa nada. 

Hace dos años y pico que el PP ganó las elecciones obteniendo la mayoría absoluta más aplastante de todas las conocidas hasta el momento. No hacía falta entonces ser un lince para ver que Mariano Rajoy era probablemente la persona menos indicada para dirigir un país y mucho menos en la situación que éste se encontraba. Tampoco hacía falta un master en Inteligencia Superior para saber que si el Partido Popular ganaba las elecciones no íbamos a abandonar la trayectoria descendente de catástrofe total. 

Pero se veía venir. No es un problema de no ver la realidad. Es un problema de no querer ver más allá de la pantalla del teléfono. No son más cabrones los que gobiernan —que al fin y al cabo se limitan a cumplir (parece mentira que tenga que ser precisamente ahora en semejantes supuestos) lo que en su momento prometieron— que aquellos que un día se levantaron y decidieron votar a quienes votaron dando así la victoria a quienes ganaron.

Pobres Magnates de Thomas Frank —por aquello de fingir que esto es un reseña y no una pataleta— es el análisis que Thomas Frank realiza sobre la situación política de EEUU en el momento actual, cuando el ala más extrema de la derecha, la representada por el llamado Tea Party (búsquese el parecido razonable con el relaxing cup of café con leche si se quiere) escala posiciones hacia la Casa Blanca desde que el poder ya no tiene secretos para ellos. 

Thomas Frank dedica mucho tiempo (más del necesario, seguramente) a analizar las razones por las que, en una situación como aquella en que se encontraba el país después del crack del 2008, son precisamente los menos indicados quienes van ganando cuotas de poder cada vez mayores. La mentira, la confusión, un falso abanderamiento de los derechos civiles, una promesa de salvación que sabemos falsa. Nada nuevo bajo el sol: “Tenemos una obligación contraída con quienes se encuentran en peor circunstancia”, decía Mariano Rajoy desde la terraza de la calle Génova aquel 20 de noviembre. Promesas, promesas.

Pero el escenario que debería preocuparnos más es lo que sucederá cuando la nueva derecha más ideológicamente decidida ponga sus manos en el resto de la maquinaria del gobierno. Son el mismo equipo destructor que fueron sus predecesores, naturalmente, pero ahora tiene el descaro suficiente para pavonearse, en tu cara, de su actitud saboteadora.

Thomas Frank sabe lo que ha ocurrido en su país, sabe lo que está ocurriendo y sabe, como sabíamos nosotros, como estamos comprobando ahora, que la derecha no es la solución sino parte de el problema. Es de suponer que en EEUU llegará a gobernar el Tea Party, tal como aquí lo hace, ya, el relaxing PP. Se intuye, además, que se trabaja con un nivel de inteligencia e hijoputismo similar. Sabemos lo que ocurre y lo que va a ocurrir y sabemos que no conduce a nada bueno y sin embargo aquí estamos, un año más, un día más, un recorte más. Aquí estamos, más imbéciles, más cretinos y más despreciables cada día. 

“Pobres magnates” es Thomas Frank viendo la piedra caer.


22 comentarios:

  1. Es que han trabajado bien, muy bien. Esto que vivimos ahora es el resultado de una estrategia transversal y global perfectamente diseñada hace más de 30 años. Susan George ya nos lo explica en 2007 con pelos y señales en "El pensamiento secuestrado". Ahora no nos queda más que recoger las ruinas de lo que fue el estado del bienestar, recomponernos y esperar que una nueva generación deje atrás la posmodernidad, recupere la palabra, llame a las cosas por su nombre y se levante para volver a construir.
    Leeré este libro, Carlos

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  2. No seas tan facharrrojo, Tangazo; TU partido, CORRUPSOE, gobierna Andalucia desde hace 32 años: padecemos, los andaluces, la peor sanidad privatizada (16 hospitales privatizados por los tuyos) de España, la peor educacion publica de España, el mayor numero de parados de España, con una television publica corrupta y facharroja que manipula hasta la informacion meteorologica. Los jovenes andaluces tienen que emigrar para encontrar trabajo, porque el gobierno facharrojo del PSOE ha desmantelado industrialmente Andalucia, donde sólo trabajas si eres un facharrojo con carné del PSOE y el PSOE te mete en la Unta corrupta, una banda mafiosa que les roba hasta los parados (casos ERE, Invercaria, Mercasevilla...)..En fin, Rajoy es una hermana de la caridad comparado con el terrorista de los GAL Rubalcaba, el tipo que nos metido en esta ruina..En fin, no sabia yo que eras un pedazo de facharrojo

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    1. Y tú más, hala

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    2. Usar términos como "facharrojo" son síntomas de alguna enfermedad mental, creo.

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  3. Desconozco el título original, pero aquí bien podrían haber jugado un poco con las letras y dejarlo en “Pobres mangantes”, que es lo que son esos peperos que de la portada del libro, muy chula también, aprovechan hasta la pezuña…
    Se han cargado a la clase media, que siempre es la que sostiene a cualquier sociedad que valga la pena. Sí, puede que, a partir de ahora, todo quedará en manos de un puñado de pobres magnates (yo que sé, ¿un 5% de la población?), pero oye, recuerda que los otros pobres sufridores seguimos siendo muchísimos más… y además leemos libros.-

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  4. Pero si las previsiones son excelentes! Que nos estamos recuperando, hombre! Jaja! es tan bestia lo que está pasando que no tiene nombre. No solo el PP, el PSOE o la madre que los parió a todos, que son todos exactamente lo mismo, sino el efecto tenaza aplicado al pescuezo de la clase media para obligarla a renunciar a todos los derechos adquiridos - y pagados de sobra - que seguiremos pagando, of course, pero ya no volveremos a recibir nunca más y encima contentos de tener un curro de mierda, que la vida está muy jodida.

    En fin. Sí, mejor seguir leyendo, como dice Krust, y evitar malos pensamientos.
    Saludos

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    1. Un curro de media jornada y arreando, como servidor, que me temo que será el rollo laboral del futuro. Por cierto, Ire, coincido contigo en lo referente a medir con el mismo rasero al binomio PPSOE: la misma banda de papafritas turnándose la partitocracia estatal, ya sabes...

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    2. Eso de que la clase media es la que sostiene las sociedades que valen la pena habría que discutirlo un pelín, queridos. Aquí, y en Roma, quien aguanta a las sociedades (las que valen la pena y las que no) es la clase trabajadora, los proletarios, los currantes, que poco a más o menos venimos a ser todos, incluso aquellos que pensais que ahora sois clase media porque habeis comprado la moto de la nueva clasificación de las clases (alta, media, baja) y ya nadie se quiere identificar con la clase baja, que en realidad es la clase trabajadora.

      Trabajador es todo aquel que trabaja por cuenta ajena, todo aquel que está sometido a plusvalías, independientemente de la marca de coche que tenga o de dónde pase las vacaciones.

      La clase media es la que ha generado la crisis con su ambición, propiciada por los grandes poderes financieros, que son las aristocracias del siglo XXI. Y quien de verdad las está pasando putas son los de siempre, los trabajadores. A éstos, querida Irene, no les queda ni el consuelo de ponerse a leer plácidamente para olvidarse de que su niño, tampoco hoy, podrá cenar caliente.

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    3. Bueno, Hablador, a lo mejor no me he expresado bien. Por "clase media" entiendo al pequeño empresario, al trabajador liberal o al asalariado medio/alto, que no ha vivido en ningún momento por encima de sus posibilidades, que no se ha aprovechado lo más mínimo de las especulaciones inmobiliarias, que ha cumplido y sigue cumpliendo religiosamente con el pago de sus impuestos, pero que ha visto drásticamente reducido su nivel de ingresos y su poder adquisitivo y, por lo tanto, su capacidad para generar riqueza a su vez, y que había accedido a ese "estatus" con esfuerzo y seriedad. Esta "clase media" también las está pasando putas y me temo que es la única que puede hacer algo para evitar que todo esto se vaya definitivamente al carajo.

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    4. ¿Y qué es un pequeño empresario? ¿Alguien que tiene una furgui y hace portes? ¿El albañil de toda la vida, que llegó a Madrid procedente del terruño y que se metió a constructor? ¿Alguien que tiene una empresa y explota cada día a 10 desgraciados? ¿El autónomo que colocaba ventanas de aluminio a destajo?.

      Estos son los que auparon al PP; éstos son lo que todavía hoy añoran a Aznar. Estos son los del esfuerzo y la seriedad, que facturaban en negro, que contrataban a inmigrantes ilegales, que defraudaban al fisco nada más levantarse. Esos, y otros muchos grupos de "emprendedores", son los desclasados que han abierto la puerta al desastre con su ambición

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    5. No. El pequeño empresario es el señor que tenía un pequeño taller metalúrgico en Pueblo Nuevo, por ejemplo, que lo había heredado de su padre, que entraba a las 5 de la madrugada y salía a las 11 de la noche si había pedidos que servir, que daba empleo a 10 trabajadores que cumplían su horario laboral de 8 horas, que lo hicieron mudarse del "22 arroba" porque el taller era muy poco cool, que se embarcó en una hipoteca para trasladar su negocio y seguir con lo suyo, y que va a tener que cerrar si no quiere que se lo acaben de comer las deudas, que por suerte para él le queda poco para jubilarse, por ejemplo.

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    6. Sí, a ese grupo también lo conozco. Yo he trabajado para tipos así. Nos daba empleo, lo cual significa que de un modo altruista, nos hacía el favor a sus trabajadores de pagarnos un sueldo para darnos de comer; una dádiva, vamos.

      O dicho de otro modo, que para darnos el pan a nosotros, se lo quitaba él de la boca., pobrecito él, con sus deudas, sus noches de desvelos, y su piscinita se burgués, su jubilación, su plan de pensiones, y su casa en Puigcerdà, adonde se retirará con una holgada renta, fruto exclusivo de su tesón, y de sus sacrificios...Y qué sería de nosotros, vulgares currantes, gente del pueblo, si no fuese por el ímpetu y el dinamismo de esta raza de hombres que nos da de comer

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    7. Bueno, todo eso lo pones tú de tu cosecha. Tú sabrás con qué tipo de patrones te has encontrado. Lo de la "holgada renta" ha tenido mucha gracia.

      De todas formas no te preocupes, que con esos sí que han acabado ¿O te crees que alguien va a ser tan gilipollas como para arriesgar la pasta para hacer "caridad", según tú, con nadie?

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    8. Ahora más que nunca Ire.
      8h =600 €.
      Despido libre.
      Seguridad social= 0
      Y sin convenio colectivo que te toque los cojones

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  5. Digo yo que esa gente que votó al PP, pretendían salir de Guatemala pero acabaron en Guatepeor.
    En cuanto al libro: el fondo es interesante, pero parece que da demasiadas vueltas a la misma idea un poco para rellenar.

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  6. Primero te preguntan si quieres más a mamá o a papá.
    Luego, que si eres del Madrid o del Barça.
    Que si de Belén Esteban o de (...), no sé si existe alternativa.

    Finalmente, dicen derecha o izquierda y nos sentimos obligados a alinearnos.

    Yo no soy de ninguno. Ni siquiera creo que se diferencien entre ellos, más que buscar en el enconamiento generalizado una forma de salvarse (ellos).

    ***

    Me gusta que la paternidad azuce tus ganas de pensar. Mola mazo.

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  7. No te preocupes por disimular, a todos nos da por dar pataletas cada vez que nos ponemos a escribir de lo que sea. Estando el mundo como está es normal. Ahora eso sí, igual después del desahogue deberíamos hacer alguna cosa más, porque aunque casi todo parezca perdido, no todo lo está.

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  8. Yo últimamente oigo a muchos diciendo eso tan bonito de que: "aquí lo que tenía que pasar es que volviera Franco" (y lo dicen miembros de la clase trabajadora y media/baja y, sobre todo, desempleados).
    Así que aún tendremos que estar agradecidos de aguantar a Mariano y no a Paquito 2

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  9. Tongoy, yo aquí he venido a hablar de tu libro, no de política...

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  10. Creo que la actualidad política no es su fuerte. El Tea Party está muy de capa caída en USA, incluso dentro del Partido Republicano, porque lo responsabilizan de sus recientes y repetidos batacazos electorales.

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  11. Ufff me sorprende como pocas veces el infímo nivel, por no decir inexistente, de los comentaristas de este post (salvo algunas excepciones como Pobrecito hablador e Ire y su debate y éste último de Sofia A.). Es que a nadie le preocupa estar informado? Conocer de dónde proviene la que está cayendo? Diferenciar entre teorías políticas, sociales, económicas o saber ver sus conexiones? No es tan complicado, de verdad, bastaría un poco de interés y un mucho de ser consciente de lo que sucede.

    Iba a exponer mi opinión acerca del Tea Party y la diferencia con el pensamiento político Neocom (que bajo mi punto de vista se podría aplicar con mejor acierto a las teorías y prácticas del PP: liberales en lo económico y muy conservadores en todo lo demás. Desmantelamiento del prestigio y la idea de lo público y de sus estructuras a favor de una clase dirigente que suele ser la suya. Y otras matizaciones.) pero me da pereza ahondar más en el análisis, para que tuviera algún sentido e interés debería ser en un foro donde no se tuviera que partir de un montón de opiniones sin criterio ni conocimiento. Y lo que es peor, ni ganas por su parte.

    Joer, no me extraña que estén pudiendo como pueden con nosotros, si este es el percal en una generación joven y supuestamente formada… apaga y vámonos!

    Marga

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  12. Yo me he acordado de este poema de Ana Blandiana, (Rumania, 1942), me parece que nos define muy bien

    YO CREO

    Yo creo que somos un pueblo de plantas,
    de otra manera, ¿de dónde sacamos la calma
    con que esperamos ser deshojados?
    ¿De dónde el valor
    para empezar a deslizarnos en un tobogán de sueños
    tan cerca de la muerte,
    con la certeza de que podremos
    nacer de nuevo?
    Yo creo que somos un pueblo de plantas,
    ¿Quién ha visto
    a un árbol rebelándose?

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