“Bajo este sol tremendo” no va de nada; parece que sí, pero no. El protagonista, argentino de profesión, ve documentales y pasma moscas. Esto literal. Tampoco es que tenga nada mejor que hacer. En general todos los personajes son seres de bastante poco moverse. De todos los posibles Busqued ha elegido tres, no los más guapos ni los más listos ni los menos amorales, y los ha ubicado en una población argentina en la que el calor y la podredumbre se lo comen todo. Sus nombres: Cetarti, Duarte y Danielito. El primero es imbécil, directamente: invierte las horas en ver la vida pasar, condenándose a una existencia bastante miserable si no es por la intercesión de los demás. Dar la voz cantante de la novela a una persona sin iniciativa debería haberme dado una idea de lo que vendría a continuación. El segundo, Duarte, es genial de puro cabrón y el tercero, Danielito, un poco hijo de los dos: un tonto a las tres que hace lo que se le dice sin analizar lo conveniente o no de sus actos y no digamos ya sus consecuencias.
La historia son estos tres pasando calor unas veces, maquetando aviones otras y dando mucho asco y mucho miedo siempre. De fondo: sexo, violencia y documentales; también casas ruinosas, síndrome de Diógenes y un pez. Por lo general a mí este tipo de cosas me predisponen siempre a favor y de hecho disfruté durante bastante tiempo de la satisfacción de haberme dejado recomendar tan bien por más que la historia sea más vieja que el universo porque uno también tiene sus vicios y entre ellos están estas historias tan chungas. El problema (que ya veremos que no fue tal) es que llegó un momento en que empezó a joderme no saber a dónde quería llegar Busqued con todo este circo de apatías. No se me ocurrió pensar que no quería ir a ninguna parte porque no había ninguna parte a la que ir. Feliz idea que llegó tarde, cuando por aquello de indagar se me ocurrió leer la contraportada que hasta el momento había evitado porque esta lectura estaba siendo una cuestión de fe más que una visita guiada. La susodicha decía, entre otras cosas, lo siguiente:
Es una novela poderosa, sin reflexiones psicológicas ni demasiados datos concretos del porqué de la anestesia emocional de sus protagonistas, que recuerda el territorio de algunas películas de los hermanos Coen. Está construida desde el relato de las acciones de estos outsiders casi absolutos, sin guiños generacionales ni discursos éticos o políticos sobre la tortura, el crimen, la culpa, el vacío existencial o la historia reciente del país. Y, sin embargo, estos temas asoman en la trama, golpeando la narración como chocan los insectos contra el parabrisas de los coches que conducen Cetarti, Duarte y Danielito en sus viajes a la nada.
Dejen que les oriente: la clave está en “sin guiños generacionales ni discursos éticos o políticos sobre la tortura, el crimen, la culpa, el vacío existencial o la historia reciente del país” y sin embargo, sí, efectivamente todo eso está en la novela, lo cual es todo un logro visto la extensión de la misma. No es como otras veces que nos prometen el oro y el moro y luego no hay nada o cuando callan y se encuentra uno con demasiado. Al fin una advertencia sincera y voy yo y me la salto.
Por ir acabando, que tengo cadáveres que enterrar: apruebo las formas sin dudarlo, me gusta mucho cómo escribe de clarito Busqued, el sereno fluir de la narración; me encantan sus diálogos (lo mejor, con diferencia); su forma de ir a la esencia de las cosas aunque por momentos se le vaya la mano con nimiedades y por encima de todo el personaje de Duarte tan salvajemente natural, tan hijo de puta y tan encantador. Y la brevedad: no dedicar nada más que lo imprescindible a contar nada más que lo interesante. Tampoco estoy seguro de echar en falta el discurso ético del que habla la contraportada porque ya está la cosa bastante clarita mirando a estos tres tan faltos de contenido. Me gusta que la aparente superficialidad del texto sea intencionada pues la novela funciona perfectamente como transmisor de miserias y reflejo de miserables de ese repugnante suburbio argentino y no necesita nada más que eso para satisfacer las necesidades lectoras en una tarde cualquiera especialmente si son ustedes un poquito sádicos y gustan de ver sufrir.
Mola.
ResponderEliminar¿Qué opina del pasaje en que se describe la película pornográfica? ¿Es necesario, ayuda a crear la atmósfera, el autor nos quiere asustar? Saludos.
ResponderEliminarBuenos ojos te vean, Elegido. Te haces de rogar.
ResponderEliminarAnónimo, recuerdo esa escena demasiado bien. Me pareció muy interesante y me pilló completamente por sorpresa porque hasta ese momento no sabía qué pensar de Duarte pero desde luego eso no. Sirve para que nos hagamos una idea de la clase de persona que es. Creo que es la escena que mejor lo define. ¿Si el escritor quiere asustarnos? No, no lo creo. Es lo que le acabo de contar: creo que una forma muy efectiva de describir a alguien. Lo que ocurre en la pantalla es, entiéndame, secundario. Además, desde ese momento ya no es necesario que Busqued nos diga qué está teniendo lugar en cierto sótano. Vista ahora es una escena muy intensa y muy útil.
Un saludo,
Gracias, señor Tongoy.
ResponderEliminarSí, hará un par de años, después de leer otros comentarios de este tipo en el Babelia, bajo la etiqueta de una novela que parece el gran Lebowski de los hermanos Cohen, me pillé el libro. Resultado: buena idea, muy buen arranque, atmósfera... Que no es poco. Los capítulos alternos que narran la vida del niño y la madre, me sacan de la historia. Es el problema de muchas novelas actuales: su construcción cinematográfica. Está escrita en plan "a ver si me viene alguien y saca la película". Por supuesto, el personaje de Ceratti y su submundo de porros y televisión está muy logrado. La idea de la novela la considero superior a su resultado. Que alguien haga la película, entonces.
ResponderEliminarCambiando de tercio, para aquéllos-as que sientan difusas arcadas en la base del estómago, a medidad que se aproxima el fin de semana, siendo jueves, como es, tranquilos: no es el Indepence Day ni el Día del Hundimiento. Podria tratarse de esto:
http://www.revistaparaleer.com/noticia/2011/09/20/compra-tu-abono
Vaya circo. Sólo falta Alaska.
Dr Jacques, viva la paz social.
Ah, no, perdón. Lo de las arcadas igual va a ser otra cosa. Yo es que soy bastante lecto-gilipollas.
ResponderEliminarhttp://vicenteluismora.blogspot.com/2011/09/el-lectoespectador-portadas.html
Un placer, Anónimo (de las 17:18) (Por el amor de dios, pónganse un mote!)
ResponderEliminarDr. Jacques,
Ya sabrá usted que uno es lo que come y los de mi generación hemos tragado mucha televisión, mucho cine. A mí en general no es algo que me moleste encontrarme con libros de ese estilo tan “visual”. Mejor eso que no entender nada. También lo prefiero mil veces al exceso de afectación en el texto. Verá un ejemplo pronto; estoy empezando a escribir una reseña de un libro que no he podido terminarme: “Un día que me esperaba a mí mismo” que sufre exactamente de eso que acabo de mencionar: quiere ser un libro tan literario que acaba saliéndose de los márgenes de lo tolerable.
Los enlaces que pone ya los había visto. Cuando vi la cantidad de escritores iban al festival Ñ me acordé de una película (no recuerdo el título) en que todos los mafiosos de una ciudad se reunían en un lugar que era atacado no sé si por el malo o el bueno de la película que supongo luego acabaría controlándolo todo con mano de hierro y toda esa mierda. ¿No le da miedo a usted que todo esto del festivalito no sea nada más que una trampa de, no sé, alguna generación literaria naciente tratando de hacerse un hueco en la industria? ¿Qué vayan todos a morirse tan jóvenes y tan guapos? A mí me jode un poco por si tengo que empezar a leerme libros de niños de quince y no de veinte como hago ahora.
Me ha sorprendido también ver a Mora en Seix Barral. Al final va a ser verdad que la omnipresencia tiene recompensa. Bromas aparte tengo curiosidad por leerlo.
Un saludo,
Jaja.
ResponderEliminarLa sorpresa es que Mora "siga" en Seix Barral y más aún, siga la directora editorial que le fichó para publicar la novela que iba a romper la dimensión espacio-tiempo de la narrativa universal, "Alba Cromm". Pero bueno, algunos están tan "contactados" y "relacionados", que como usted dice, parecen ya parte consustancial del mobiliario. Me descojono con la insistencia de la criatura en seguir encontrando algo, una cosita, con la que pasar a la historia y que todo el mundo hable de él. Ahora es que somos lectoespectadores y -esta paranoia del tipo me encanta...- en poco tiempo nos van a injertar pantallas digitales hasta en el coxis.
El libro de Busqued, me encantó. Es que en su momento lo relacionaron mucho con las pelis de los Cohen. De hecho, fui uno de los Añónimos que lo recomendó aqui. Adjunto foto de la mesa de trabajo del autor. Nada más lejos de la estética jóvenes imberbes 20añeros acorralados de la granja Timadori.
http://borderlinecarlito.blogspot.com/2011/08/despues-el-agente-receptor-sera.html
Aunque usted lo habrá leido, no quiero dejar de saber su opinión sobre el adelanto del último premio Jaén. "...los gajos perpetuados en actitud de giro"...". Que le parece la frase? Timadori está empezando a hacer dañito a los ojos..
http://www.facebook.com/photo.php?pid=882445&l=5c3fe2d1df&id=135910126431676
Saludos y no deje de publicar la critica sobre la chica vilamatista.
Dr. Jacques
Ah, en cuanto al Festival, muy sencillo: lo monta Alberto Anaut and family. Es decir, editorial la Fábrica -la de la revista-, revista Matador; los que organizan en madrid el Fotoespaña. Osease: Caja de Madrid. Fin último? Promoción y pasta, pasta, pasta. Como será que este año no se llevan a Mr Gump ubicuo, el de Nocilla... Lo que es tener caché ya.
ResponderEliminarJoder, había olvidado que Mora YA ESTABA en Seix Barral. Y eso que me compré Alba Cromm...
ResponderEliminarLa foto del escritor la había visto. Interesante. Me sigue gustando más la de Franzen pero no la encuentro. El día que le pase un trapo les pongo la mía de lector, verán que risa también.
¿Los gajos perpetuados en actitud de giro? Qué bien, ya tengo para pensar esta tarde. Usted se cachondea pero esto desarrolla mucho el músculo. Me refiero al de la cabeza.
Yo también quiero compartir una frase con usted,a ver que le parece:
“No sólo mías, repite, ahora que, y desde tiempo atrás, su nombre, dice, les resulta tan familiar a todos”. El libro no lo acabé, por supuesto. A pesar de ello anoche le escribí una reseña. Ya sé que es una putada pero no he querido evitarlo.
Hoy mismo me pongo con la niña de sus ojos. Prometido. A ver que sale.
Saludos,
La encontré: aquí el escritorio de Franzen: http://entertainingwelsey.files.wordpress.com/2011/01/room.jpeg?w=265&h=290
ResponderEliminarMe encanta. El ordenador, por si hay dudas, no tiene conexión a internet.
Brutal el escritorio de Franzen. Dónde encontró esa joya?
ResponderEliminarUsted se compro el Crommo ese? Vaya, tiene que contarlo.
La frasecita de marras es como para dejar el libro, por supuesto. Aunque lo de los gajos perpetuados... se me ha clavado en las entrañas giradas de mi ser. Palpé la pared, más no en busca del interruptor. No vaya a ser que lo encontrare...
Me voy a descojonar vivo cuando el día de mañana vayan palmando los instalados, y el de Cromm sea Menistro de Cultura -entonces se denominará Panta-menistro- y malherido de segundo en las pantallas. "No vamos a contratar interinos de digispañol, el digispañol lo aprenderán los lecto-alumnos en sus digi-domicilios lectofamiliares".
La foto la encontré aquí: http://entertainingwelseyshaw.com/2011/01/30/the-office/ poniendo en google palabrejas en inglés que venían a significar "mesa" y cosas relacionadas con el escribir. Igual es un fake pero supongo que lo importa es que el método es real.
ResponderEliminarLa historia de Cromm fue una cuestión de fe, como tantas veces. Ahora soy ateo integral pero antes no, ya ve. Seguía yo el blog de Mora a ratos sí a ratos no y me venía a gustarme lo que leía. Sentía curiosidad por leerle algo ya que todo lo anterior estaba ilocalizable y un día me encontré en la tienda equivocada con veinte euros en el bolsillo y un pálpito que hoy sospecho que en realidad fue un amago de infarto. Lo de no saber interpretar las señales, supongo. El caso es que yo miraba el libro y pensaba en el blog de Mora y aquellos ensayos y aquel libro de relatos que debía ser algo así como el santo grial de lo imposible. Y me lo compré, sí. No me pareció del todo mal, que conste; había una idea de fondo que tenía que ver con la impostura y dar por bueno lo falso que me interesaba mucho porque andaba yo por entonces con cosas de Lem y Perec. Mi decepción, la de verdad, vino cuando tomé conciencia del bluff que me estaba tragando y muchos más pensamientos horribles que hicieron de mí lo que soy hoy. No lo había pensado hasta este momento pero es posible que este libro me haya cambiado la vida. No entendía si realmente Mora se ha había puesto comercial por temas de dinero (lo cual me parece cojonudo, vaya esto por delante) o es que aquello estaba resultando un fracaso vergonzante. También creo que si Seix Barral le hubiese echado huevos y publicado aquello con formato de revista –que es lo que le pedía “el cuerpo”- a Mora le hubiese ido mejor con Albita porque al final lo que acabó primando fue la historia que se contaba que era dónde Mora tenía de verdad las de perder. Tampoco hay que olvidar una cosa: era su primera novela. Las he visto mucho peores.
La mejor obra de mora es mora: un "fake" inverso. Es decir, crear un impostor dentro de uno mismo, hecho por uno mismo, es jodido de cojones. Es algo asi como: yo alimento el espejo, el espejo me devuelve la imagen, yo soy el espejo, el espejo me mira, luego soy el espejo, yo lo miro, el me mira, etc. Cambie espejo, si eso, por internet. Fíjese que el personaje mora nunca siente ni padece, es moralmente correcto, ecuánime, aséptico. Vamos, American Psycho. Y en persona, sube el nivel. Es que usted no lo ha visto con la motosierra mientras diserta sobre Phil Collins y pide sushi por la blackberry.
ResponderEliminarFascinante.
Una pregunta sobre Pynchon. Leí hace años los relatos de Lento aprendizaje, con la introducción del propio autor, en la que hablaba de su vida en esa época, la entropia, etc.
1.- Que novela del autor -que no sea un megalibraco de esos tipo Madison- me recomienda? He leido cosas como que La subasta del lote...se ha quedado anticuada, etc.
2.- Existe alguna biografia sobre el autor interesante? Tipo la de Slewenski sobre Salinger.
3.- Cree usted que Pynchon le ha pegado a la farmacopea en alguna de sus vertientes, para crear con el lenguaje esos laberintos sintácticos?
3.- La última, Vicio..., cree usted que la ha escrito él? No se saldria un poco del desparrame habitual? Quiero decir, una novela clásica, negra, irónica....
Disculpe la longitud de las preguntas, pero le considero a usted la persona que puede aclarar el camino pynchoniano.
Muchas gracias y un saludo añónimo.
Dr Jacques.
Pues se equivoca, me temo. A mi me fascina Pynchon como personaje y me parece un genio por la forma de escribir pero me cuesta horrores leerme sus novelas. Soy un vago redomado, me temo. Eso sí, comprar las compro todas. Abrí "La válvula..." en un intento de autoestimularme pero resultó ser un estrepitoso fracaso. Trataré igualmente de responder sus preguntas:
ResponderEliminar1. La subasta de lote, efectivamente, es una buena manera de empezar y tomarle el pulso. Si no le gusta yo no perdería mucho más el tiempo con él. No creo que se haya quedado anticuada. En mi opinión es intemporal. Esa, "Un lento aprendizaje" (que no me gustó) y la última son la únicas que no son tochos. Pruebe con VINELAND, dicen que es una maravilla. Si se anima avíseme y quizá me ponga con usted (cuando me termine una serie de compromisos) aunque ahora mismo no me apetece mucho. "V" la dejé a medias porque al llegar a la mitad quise volver a empezarla. Es fascinantemente extraña. Hipnótica, pero también un rompecocos de cojones por el modo en que está planteada obligándote continuamente a cambiar la perspectiva.
2. No, no hay biografía. Sospecho que tampoco sería muy interesante aunque yo siento curiosidad por conocer sus manías de escritor. Nunca las sabremos, supongo.
3. Espero que no o cuando se sepa quedaremos todos sus fans como unos gilipollas integrales.
4. A mi me pareció muy divertida. Seguro que la escribió en media hora. Igual es que quería comprarse una apartamento en París y tiró por lo más cómodo que era escribir algo para todo el mundo.
Hay cosas que no me leeré nunca. Una de ellas es "El arco iris...". Me da igual que sea una maravilla. Cuanto mayor me hago menos estoy para experimentos. En cambio "Mason y Dixon" me llama desde siempre pero me da cosa ponerme y más desde que un amigo que se lo curró a base de bien durante la lectura me dijo que había entendido escasamente un 25%. Desanima. Suele visitar este blog (es uno de los anónimos). A ver si lee esto, se enrolla y nos cuenta su experiencia.
Y luego que siempre encuentro otra cosa que leer que me hace más mal que bien, como ya sabrá.
Lamento no ser una gran ayuda.
Pues a mí me estará costando un poco leer al puto Lethem (no por culpa suya, pobre) y no seré el más lector de por aquí ni de puñetera casualidad, pero "Mason y Dixon" sí que me lo leí. Y te puedo aconsejar vivamente que no hagas lo mismo. No dudo que aplastarse las pelotas con un martillo no pueda considerarse arte pero ¿para qué, con la de libros que te puedes leer en ese tiempo y lo bien que penden los huevetes en su completa huevez?
ResponderEliminarY eso. En cuanto al tal Mora, quisiera tener un opinión propia pero de momento tendré que ir haciendo con la vuestra. Más o menos lo mismo que con Olmos y compañía, que ya me van cayendo como el puto culo.
¡Gracias, joder!
Lethem es bueno (a pesar de la pereza que da leerlo, y no por culpa suya, pobre). Yo creo que no se lo merece.
ResponderEliminarAmigos, oh, amigos: educación, asertabilidad, escucha, autocontrol, fluidez comunicativa, empatía... ¿cuándo, dónde perdisteis esas virtudes teologales, imprescindibles para sobrevivir en el capitalismo emocional? ¿en qué lodazal y/o panta-página las dejasteis abandonadas?...
ResponderEliminarA lo que iba, Carlos: el de Busqued es bueno, me gustó. Un libro en el que no hay rastro de afectación, algo que hoy se agradece mucho. Y una cosa tal vez marginal, de poca importancia, pero que me gusta mucho: el título es buenísimo. ¿Tu opinión sobre la importancia del título en una novela? Thanks, y abrazo.
Dr. Jacques, saludos (y serenidad).
Gracias, Mr Peón, por la respuesta. Es que a mi me pasaba algo parecido con Pynchon. Intenté leer un par de veces no se qué de Vineland, y no pude. Entonces, a ver si lo intento con Madison algún día. Estamos hablando, entonces, de un caso acojonante. Un escritor mítico -por su añonimato mediático, digamos- que no lee ni zeus, por su crudeza o rudeza? En fin.
ResponderEliminarClemente, salud. Tengo mis motivos, créame. Por lo demás, no podía estar más tranquilo. En estos momentos, Winona Ryder se está dando el palo con Ethan Hawke, en la Sexta3, Bocados de realidad: dios mío, como me ponía a mi la Winona. Que será de ella? Voy a ver si me organizo una búsqueda por las pantapáginas internéticas.
Dr Jacques, lorazepam y firefox a tope.
A Vineland sólo le encontré un defecto que no me atrevo a calificar de objetivo y es que soy un bicho muy raro y ya desde jovencito Franki percibí que la televicio era un aparato indigno de conquistar mi atención y en Vineland hay mucha influencia televisiva que tuve que pasar por alto al desconocerla casi totalmente; para que algún viejo me entienda, por ejemplo, recuerdo que en Falcon Crest una buena parte del argumento consistía en que nadie podía estar seguro de quienes eran sus progenitores, ni físicos ni simbólicos y esto que digo no era sólo en Falcon Crest era en toda la parrilla.
ResponderEliminarPara alguien que firma como Dr Jacques creo que lo dicho bastaría para que se interesara por la novela.
Sobre el punto tres yo creo que Pynchon es Vaca Sagrada y por tanto nadie debe indagar en los alimentos de su elección siempre y cuando estos ,los alimentos, abonen vidas de ficción bien construidas y las suyas lo están.
En cuanto a Mason y Dixon mi problema fue otro: esperar constantemente a Henry Burlingame, que sin embargo no tuvo a bien hacer acto de presencia; esto, dicho así, pudiera parecer una crítica y sin embargo es un elogio , no el que no apareciera, sino el que casi siempre diese la sensación de que iba a presentarse de un momento a otro, y ahí es exactamente donde entran los porcentajes de comprensión y satisfacción lectora, yo con Mason me reí y al hacerlo tenía la sensación de que mi risa era impecable pero también de que dada la complejidad de lo que me hacía reir quiza me estuviera riendo menos de lo que debería (si fuera yo tan culto como me tengo)
Mi impresión es que este invierno la volveré a leer.
Carlos, lamento que te sintieras en el mismo saco que la persona a quien aludía cuando hablé de porcentajes, date una oportunidad, sácalo de la biblioteca y si ves que no te atrapa déjalo para más adelante.
Brevemente; no tengo mucho tiempo:
ResponderEliminarNo me sentí en el mismo saco, Oveja, pero te considero mucho mejor lector que yo y si sólo llegaste al 25%... Pero de acuerdo, aclarado queda. Tiene capítulos cortos, puedo dedicarle uno cada día. Además no tengo que sacarla de la biblio porque lo tengo desde hace tiempo. De PYnchon los tengo todos menos los relatos, que no voy a comprar. (Por cierto, me alegra saber de tí).
Si les parece me pienso lo de abrir un hilo sobre Pynchon por aquello de ir centrando el tema.
Cadou, los títulos me dan un poco igual siempre que no sean tan malos que me den una idea de lo que hay dentro. Por ejemplo, "Si tu me dices ven lo dejo todo pero dime ven". De ahí no podía salir nada bueno.
Por cierto Dr Jacques, estaba viendo el suplemento de El Pais de la semana pasada, el de la portada de Franzen y sacan una foto de él en el escritorio del que hablábamos. Se ve que no era un fake.
Otro día les contesto con más calma.
Saludos,
La cosa se pone interesante! Me parece excelente la idea de abrir un hilo sobre Pynchon, con aportaciones de Oveja, experto en el tema.
ResponderEliminarVolveré a mirar el suplemento EPS, lo tengo por ahi, con lo de Franzen. Queda muy poco para la salida de Libertad en español. Afilando la punta del lápiz.
Me acabo de pillar la biografia sobre Salinger de Slewenski. La dependienta pregunta: "Es para regalo?". "Pues no". Supongo que gastarse 24 euracos en un libro a la hora de la siesta es algo extraño. Lo poco que llevo leído no defrauda en absoluto. Me están entrando ganas de salir de bares esta noche.
Dr. J.
Dr.Jacques, ¿está usted disponible? Le amo.
ResponderEliminarAnónima.
Sí, sí, claro. Además, si eres añónima, ya sabes.
ResponderEliminarLo jodido es como reconocernos entre añónimos.
Dr. J.
Bueno, Dr. Jacques, deme una señal entre añonimatos y nos vemos.
ResponderEliminarAnónima.
Abracadabra.
ResponderEliminarDr. J.
Ah...
ResponderEliminarAnónima
Anónima > abracadabra4u29@yahoo.es
ResponderEliminarDr J., desde el locutorio.
Vayánse a un motel.
ResponderEliminarEsto es intolerable.
ResponderEliminarPero vamos a ver, si yo tengo mi consulta en un motel. Un poco de calma, muchachos. Hay para todos.
ResponderEliminarMr Peón, junto a la línea Pynchon, de próxima apertura, le sugiero la cración de un área parking para el tema de "contacting" para-literario. Resultaría novedoso y estimulante.
Esto es intolerable.
Dr J.
Analizadas las sugerencias se propone la siguiente resolución:
ResponderEliminara) Que quien tenga ganas de hablar de Pynchon lo haga en la Válvula de espato.
b) Si el señor de Tongoy está de acuerdo en abrir la seccion de "contacting" nos parece que lo más adecuado sería que se llamara " A la caza del Snark" bicho cuya caza suponemos
análoga, cambiando lo que haga falta, a la pesca del cordoveyo.
Fdo
Secretario Penúltimo del Rebaño Global.
A la caza del Snark? No sé si le va a hacer mucha gracia a las posibles aludidas. Eso sí, acentuará la marcada deriva misógina de los comentaristas.
ResponderEliminarAnoto todas las sugerencias y hago ciertas puntualizaciones:
ResponderEliminar1º. Miren, todo lo que sea follar me parece bien. Lo apoyaré en la medida de lo posible aunque nada más que sea con aplausos pero ya se lo adelanto: no voy a bodas. Ahora veremos a ver si esto de las citas evoluciona o queda aquí la cosa.
2º. La bio de Salinger es genial. Me gusta mucho toda la parte que habla de la creación del cuento del pez plátano. Ya me dirá.
3º. Pynchon. Verá Sr. Secretario, la Válvula de Espato (para los despistados http://lavalvuladeespato.blogspot.com/) es un buen lugar en el que hablar de Pynchon pero creo que funciona mejor como receptáculo general de noticias, enlaces, etcétera. Además, hágame caso, si queremos que esto sea leído lo mejor es que salga de aquí y no de allí.
Sigo con Pynchon. La conversación (breve) y la idea de abrirle algo (pronto) resultó estimulante en grado sumo. Tanto que el sábado empecé a leer “Mason & Dixon”. Voy muy despacito porque me lo quiero tomar con calma (más o menos como el amigo Quique con el de Lethem). Apenas he llegado a la página 44 y se impone una pausa documental pero espero llegar a buen puerto en un par de meses, tres a lo sumo.
Saludos,
Pues yo lo de "a la caza del Snark" lo he entendido a la inversa, fíjense ustedes, nunca se sabe quien va a la caza de quien...
ResponderEliminarAnónima.
Pero, qué es un/a Snark? Me sonó a ballena, pero igual va a ser un elfo. Gato blanco, gato negro, lo importante es que cace ratonas-es.
ResponderEliminarDr. J.
El punto 1º, simplemente genial.
ResponderEliminar1º. Miren, todo lo que sea follar me parece bien. Lo apoyaré en la medida de lo posible aunque nada más que sea con aplausos pero ya se lo adelanto: no voy a bodas. Ahora veremos a ver si esto de las citas evoluciona o queda aquí la cosa.
No, si al final va a haber fiesta de nochevieja...y bus de blogueros a la Laboral de Gijón. Muy bien.
Oye, guapo, que lo de leer de 5 páginas en 5 páginas no es una afición sino una vida de mierda, que me impide correr más. No es, como llegó a insinuar un tomego anónimo de tu corral, que no me esté gustando. Es que la cosa está como está y gracias que no lo mando todo (lo literario) a tomar por el culo. Dicho esto, vuelvo a la lectura. Sacrifico la paja.
ResponderEliminarHay una entrevista muy buena a Busqued en youtube: http://www.youtube.com/watch?v=GnHOh4e8TKE
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