No es habitual que yo me informe [demasiado] sobre una novela antes de leerla pero en esta ocasión me hizo gracia ver -vía Facebook- tantas entrevistas consecutivas de la tournée española de la niña Viola. Entiendo que debemos estar ante una de las promociones salvajes de Alpha Decay al más puro estilo Tao Lin (aquella novelita que tanto daño hizo a la inteligencia.) Esto lo digo para que se vayan imaginando el resultado.
"Quería contar una historia que se hubiera caído a un agujero” –dice Viola di Grado en una entrevista que le hace Laura Fernández para El Mundo- “un agujero que ha devorado todas las palabras. De ahí que intenten [los personajes] comunicarse con miradas. [...] Como escritor, me interesaba el hecho de poder ir rescatando las palabras de ese agujero, de ir dándoles un nuevo significado", añade. Qué bien: un problema semántico. "También me gusta mucho el filósofo chino taoísta Zhuang Zi, del siglo IV a.C., que decía que hay que olvidar el lenguaje, no caer en las trampas de las convenciones y atreverse a reinventarlo. Algo así es lo que intento hacer. Es mi misión como escritora". Y aquí queda la cosa. Una escritora con una misión. ¿Qué, acojonados? ¿Todavía no? Pues denme un minuto. Esta misma información (la del chino) la ofrece en una entrevista que le hace Xavi Ayen para La Vanguardia pero él debe estar más bueno que Laura y se lleva el gato (de la respuesta) al agua (de la incertidumbre): “Mi misión es escribir sin tener en cuenta las trampas y convenciones que llevan las palabras adheridas. Uso cada palabra desde cero, sin su herencia. Como si fueran vírgenes. Les doy otro significado, las coloco en un nuevo contexto, y sorprenden a quienes suelen verlas diciendo otras cosas. Ese desplazamiento crea una sensación de extrañamiento en el lector”. La pregunta que me hice entonces fue la siguiente: ¿para qué quiere provocar Viola una “sensación de extrañamiento en el lector”? ¿Hay una razón [literaria] o no son nada más que trucos baratos para llamar la atención sobre su forma de escribir, para alimentar las pajillas mentales del lector postmoderno, para darle algún sentido a los estudios taoístas de marras? Total, que me voy a quedar todos sin respuesta al misterio porque me he leído cuatro entrevistas a cual más parecida a la anterior con el mismo resultado y si algo tengo claro es que yo paso de leerme al Chino Cudeiro para descubrirlo.
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Esto que voy a decir ahora me consta que es una barbaridad pero no lo puedo resistir: no debería estar permitido que los menores de treinta años escribiesen libros. Me da igual lo listos que sean, me da igual lo mucho que hayan leído, me da igual lo alta que sea su cuna. Me trae completamente sin cuidado. Habría que ir mirando de controlar esto porque luego pasa que niñas de veintitrés años -que aseguran que a los cinco escribían sobre osos que se querían suicidarse sin éxito- van de mujeres fatales de la literatura y hablan de reinventar el lenguaje porque le han leído a un monje shaolin que es bueno para el alma.
Viola di Grado asegura en Público (el diario, claro) que piensa como escribe y yo, que me he leído toditas todas las primeras sesenta y tres primeras páginas del libro (y hasta aquí) he querido escribir pronto esta reseña preventiva para advertirles de que hagan lo que hagan no la inviten a debate alguno si no quieren acabar hechos un nudo gordiano. El estilo de la escritora es cuando menos peculiar y en él todo se presta a la comparación: he debido leer unas novecientas ochenta y tres frases en las que para explicar cualquier chorrada tenía que compararla con alguna memez que no venía a cuento. Han sido setenta páginas larguísimas, tipo esto: “Vi como se alejaba bajo la luz porno del ocaso. Entré en casa. Dejé fuera el matadero de nubes carnosas y sanguinolentas”, que debe ser la forma que tienen en Sicilia de decir que va a llover. Para lo del “porno del ocaso” no tengo explicación aunque quizá les sirva de ayuda (seguramente no) el hecho de que la protagonista viva convencida de ser “el sueño erótico de las contraventanas de las excolonias industriales” (cito de memoria). Impagable, sí.
Si es que no hay por donde cogerla, de verdad. Ya no se trata únicamente de que a mi esta niña me caiga antipática por la manifiesta falta de humildad; es también por el estilo alambicado de su prosa, por sus personajes mal construidos; por ese desapego general hacia todo: no le gusta la moda, no le gusta la gente, no le gusta hablar, no le gusta internet, no le gusta, no le gusta… Porque ella es especial, entérense de una puta vez, especial y diferente y se va a inventar un lenguaje y los va a dejar a todos ustedes “tumefactos” de envidia, por ejemplo, porque ella hace de su semántica un sayo y nada más que necesita que dejen de tocarle los ovarios con sus humanidades y sus consumismos porque ella no es de la tierra, ella es mucho más que una simple mujer: ella la filosofía de Kwai Chang Caine reencarnada.
Por darle un punto informativo a este post tan chapucero les diré que he leído por ahí que el libro habla de la imposibilidad de la incomunicación. También sé (soy algo así como un no-experto no titulado) que en Italia le dieron dos premios: el Carige y Campiello, que como premios no sé pero como vinos suenan de fábula. Por cierto, ya se pueden imaginar que la niña Viola es la revolución literaria del año de, no sé, el norte de Europa, por ejemplo. Lo cierto es que a mí personalmente me parece más bien que Viola es un producto (puro marketing) como lo fue Tao Lin y que detrás de su discurso de adolescente rebelde hay un vacío tan inmenso que se puede ocultar de todo, también las carencias. Ella, que no se adscribe a modas, no tiene problema alguno en etiquetar su novela como "surrealismo hiperrealista" ni en llevar el posmodernismo al extremo asegurando que su próxima novela (que por supuesto ya está escribiendo) "vuela, habla y come carne humana" (que digo yo que a ver quien es el chulo que edita algo que te puede matar mientras te cuenta un chiste). Hagan ustedes lo que quieran pero yo estoy harto de estas chorradas de niña mala. Esta vez sí: me bajo de Viola y Alpha Decay.
Ay, Carlos, Carlos, que ahora lo van a acusar de no querer prestarles atención a los jóvenes y refugiarse en su decimonónico Dosto... ¡Con lo que ellos son!
ResponderEliminarCuánta chorrada, Dios.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarJajaja, joder, pues si yo no le presto atención a los jóvenes....
ResponderEliminarEs que Alpha decay se ha convertido en una chorrada de editorial, una penita... antes hasta publicaba a Coetzee.... en fin
ResponderEliminarNo tenemos bastante con leer obras durante 2000 años de escritura para estar encima... ¿pendientes de cualquier mocoso que le de por inventar?
ResponderEliminartrabajazo oigan....¡¡
Me encantaría ver cifras de venta reales de la editorial Alpha Decay.
ResponderEliminarPues yo ya la he leído y me parece una novela de puta madre. Y me ha llamado la atención justo lo contrario, que una chica tan joven sea capaz de crear esas imágenes y escribir así. Es que a mí las cosas diferentes y nuevas me gustan para empezar. Pero ya se dice que sobre gustos no hay nada escrito. Saludos.
ResponderEliminarDice el autor del blog:
ResponderEliminar"Si es que no hay por donde cogerla (la novela), de verdad. Ya no se trata únicamente de que a mi esta niña me caiga antipática por la manifiesta falta de humildad"
Está bien saber que no se trata ÚNICAMENTE de que te caiga antipática. Reconforta saber que, además, manejas argumentos puramente literarios. Lo agradezco, porque el autor del blog no está acostumbrado a tan tediosos sacrificios.
Señor Tongoy, créame que lo entiendo. Yo estoy abierto a cosas nuevas, me gusta leer nuevas propuestas, por lo que he leído algunos libros de Alpha Decay (Oloixarac, Otero, Tal Lin, entre otros). Por desgracia, me han parecido malísimos. Digo por desgracia porque hay pocas editoriales que apuestan por lo nuevo, lástima que Alpha Decay lo haga, para mi gusto, con pésimo gusto literario. Es más, no creo que lo literario sea el criterio con que eligen lo que publican (me parece una evidencia), sino más bien "el perfil" del autor. Ya sean las quince páginas de un autor de Hollywood, o esta niña italiana tan singular. En realidad, Alpha Decay NO es una editorial literaria. Y lo más triste de todo es que ni siquiera así venden...
ResponderEliminar"La modernez en España es realmente un círculo tan pequeño que es casi invisible. Hay algunas editoriales en España que solo publican a actores o a cantantes, y es de una vaciedad absoluta. Pero esa modernez insoportable es solo cosa de Barcelona." Olmos en el ABC.
ResponderEliminarMiren hasta que no se entienda por ahí que el envoltorio del caramelo debe hacerlo apetecible y no justo lo contrario, es decir, entrar ganas de obviarlo cuanto antes mejor, no iremos a ninguna parte.
ResponderEliminarSe critica la animadversión el propietario de este blog hacia la autora provocado por falta de química, por así decirlo. Es que no se puede publicitar a la niña en base a un relato sobre osos suicidas a los 5 años. Eso destrempa al más predispuesto.
Yo gané un concurso literario escolar a los 8, cuyo premio consistía en una bolsa de chuches, con un relato basado en un atracón de hormigas, y mucho me libraré de citarlo en mi currículum, por si alguien guarda alguna copia.
Qué cosas
ResponderEliminarYo estoy de modernez hasta el tájano oigan.
ResponderEliminarEsto no es una crítica, es otra pedorreta del abuelete Tongoy.
ResponderEliminarYo no puedo leer un libro de una señorita que sale con esa cara en las fotos. Con las frases que usted ha citado ya he leído bastante. Cometí el error de comprar la novela de Micah P. Hinson y tengo suficiente.
ResponderEliminarLa perla del Olmos sí que es una buena pedorreta. Ahora va de legal, el tío.
ResponderEliminarA mi lo del ocaso porno me ha hecho un poco de gracia. ¿Más opiniones efectivas de alguien que haya leído la novela? Yo también decía muchas estupideces supinas con 23 años con ánimo de parecer un poco afectada.
ResponderEliminarZhuang Zi -y supongo que el taoísmo en general por extensión, por metonimia- un "Chino Cudeiro".
ResponderEliminarQué nivel, Maribel.
No he leído la novela, pero eso de la "luz porno del ocaso" me ha gustado, la verdad. La tosquedad del filo del cuchillo del crítico empuja a ir interesándose más por los comentarios de este blog que por el texto de los posts en sí. Son más breves y dicen lo mismo: mala baba y rollo chungo, que también entretiene a ratos.
ResponderEliminarComo en el furbor, los italianos nos la cuelan cada equis tiempo. Pasó hace unos añitos, con aquélla especia de mediaLuna que se habia follado a todos los del instituto -alguien se acuerda ya de eso?- y ahora toca la gótica sensible deprimida cerca de Leeds. Normal cien por cien, Leeds y el norte, y los ingleses, es pa deprimirse. Por lo mismo se me coló a mi en el piso compartido un metro cincuenta y pico de italiano, enganchado al facebook y deprimido, y hubo que darle la licencia antes de tiempo.
ResponderEliminarUna duda, la chica de la portada es mediaLuna resacosa, no?
Coincido con la persona que menciona lo del libro de Hinson. Yo también piqué.
Sobre el Olmo herido, adelantar ya algunas perlas leidas a salto de cabra en las Fnacs. "Barba negra como un huracán...", me pareció leer. Y otras lindezas. Este chico sigue teniendo un grave problema ego-sintáctico y de encabalgamiento de palabras. Tratamiento? Otra temporadita a la sombra con el Fdez Mallo, en celdas aisladas, sin internés. Olmo herido, el formspring y demás los tenias que haber chapado en el periodo de escritura y correción de eso de Timadori. No en el periodo de promoción.
Dr. Jacques, desde el ambulatorio.
Yo tampoco creo que Alpha Decay esté haciendo una apuesta fuerte por la, digamos, buena literatura. Está vendiendo un producto modernete a base de fichar jovencitos de moda, Hinson o Cera, por ejemplo, que son siempre la hostia. Que me parece bien, ojo: la pela es la pela y el negocio hay mantenerlo pero a estas alturas de la película ya veo por donde van los tiros y estoy de verdad un poco harto de caer en lo mismo una y otra vez. Si no somos compatibles no somos compatibles pero por otro lado no quiero dejar de quejarme hay veces que clama al cielo, como esta.
ResponderEliminarTambién yo estuve a un tris de leerme el de Hinson porque es un tipo muy curioso y porque musicalmente me encanta pero no acabé de fiarme y por lo que he leído acerté de pleno. Otro al que le tuve muchas ganas fue al de Stone Junction pero luego se me pasaron porque me lo tenía que comprar para leerlo y no me dio la gana.
Respecto a la falta de química... Sería un buen tema de debate. Lo dejo sobre la mesa. Yo opino como un comentario que acabo de leer en facebook: el prejuicio es un criterio de selección tan bueno como cualquier otro. En cualquier caso la forma que tiene cada uno de ser de algún modo tiene que acabar llegando al papel de alguna manera, no? Y a la protagonista le veo demasiados puntos en común en la autora como para obviarlo. De todos modos lo peor de toda la novela son unos personajes apenas esbozados y una narración sobre la que no se puede pisar en firme porque está plagada de minúsculas digresiones. Es como leer haikus de Javier Marias.
Y yo con 23 también decía muchas estupideces, pero digo muchas más con los 39 que tengo ahora. De hecho casi no digo otra cosa. Pero no engaño a nadie ni me pongo a escribir supuestas maravillas.
Un saludo,
Dr Jaques, ¿ha leído la reseña de Pron sobre el de Olmos?
ResponderEliminar¿Mala baba? ¡Pero si somos de lo más indulgente!
ResponderEliminarMr Peón, me pongo ahora con ello. Estaba echándole un ojillo al ADN -pa algo que se publica que es malo y gratis, a la par...- entre paciente y paciente. Me quiere usted tan siquiera sugerir que Pron da cera al escritor contuso? Ya estoy abriendo otro navegador.
ResponderEliminarSobre Stone Junction, lo mismo. Creo que lo pillaré por algún lado. El tema es que lleva prólogo de Pynchon. Lo que pasa es que -creo ya lo mencionó- la tipografia de AD tira patrás. No lo entiendo. Las portadas no me disgustan.
Pero lo de la tipografia se lo deben gastar en sustancias, que Bcn es muy trendy y nada barata.
Otra cosa que no me cuadra: se supone que el target objetivo del libro de la gótica son los diecinueveañeros universitarios deprimidos, erasmus retornados al hogar familiar, etc. De verdad se van a gastar 20 euracos en eso? No lo tengo visto. Por la siguiente copa, igual matan. Pero por un libraco de AD. Con lo cual, suponemos que AD estará subvencionada en vena por algún lado o simplemente se trata de un caso de dilapidación de la herencia en tercera generación.
Dr. Jacques.
Saludos! Pase el siguiente.
He muerto de la risa con esta entrada. Es la sensación que tengo yo con muchos libros que se están publicando hoy en día. Mucha palabreja, mucha niña mala, mucho facebook, mucho contrato editorial, mucho sentir y poco pensar.
ResponderEliminarEn cualquier caso, está claro que esto no es una crítica literaria. Es, si acaso, una crítica. La ironía del autor es bastante guarra e iriente. Ideal para pegarse una buenas risotadas pero poco más. No hay argumentos ni rigor literario. Hay un poco de ya-no-me-lo-trago y algo de muy-mala-leche.
A pesar de esto, suscribo su post y le doy todita la razón, oiga. Qué risa, por favor.
Ayyyyy, lo acabo de leer, mr Peón...! jajaja -onomatopéyico a tope.. Me estoy partiendo, literal. Resulta que ahora los de Timadori se desgüazan entre ellos. Esta temporada va a ser cojonuda. Claro, que el amigo Pron se la debía tener guardada. Lo que tenía que hacer el señor Claudio L. es llevárse a toda la cuadra de copas por Castelldefells y relajarlos. La becaria mediaLuna, insertada en el organigrama Timadori, está moviendo fichas. Ella y Abdullah, desde el cuarto en el piso compartido de El Raval, habian declarado "el fin del año literario". Esto es una fiesta muy grande. Esperando la portada de Abdullah en QL y próximas vendettas en la red global. Parece ser que las puñaladas internéticas duelen como las reales. Los chicos del maiz del Nuevo Botellón deberían salir encapitorados a los medios y declarar una tregua parcial. Bcn es Texas, ahora mismo. Como lo ve usted..?
ResponderEliminarDr Jacques.
En eso tiene razón, Jacques. Éramos pocos y parió la burra. Están pesadísimos con Barna. Como si no tuviéramos ya bastantes problemas de adaptación como para que nos pillen más manía por ahí.
ResponderEliminarINDEPENDÈNCIA JA!
Ya sabía yo que lo de Pron le iba a gustar.
ResponderEliminarPersonalmente creo que ahí fuera está el verdadero "matadero de nubes carnosas y sanguinolentas” y no en el Leeds de Viola. Pero es bonito que pasen estas cosas. Refuerzan la amistad.
Sí, ha sido un gran momento. Thanks!
ResponderEliminarEs lo que digo: en el aniversario de la película, los chicos están haciendo un homenaje a todo eso.
http://www.imdb.com/title/tt0072271/
Espere que todavia sacan una recopilación con el tema tejano. El argumento parece sacado de las editoriales mentadas: unos chicos viajan en furgo a visitar la tumba de su abuelo (en Bcn), cuando suben a bordo a un chico entre siniestro y parece-que-paradito (Pron) que arma el lío. Es lo que tiene el género Gore, gusta mucho en el levante (Sitges).
Dr Jacques.
Pues a Bernhard tampoco le gusta nada, y si no creo mal, a vd le gusta, sr Tongoy. Así que dudo que precisamente ése sea el problema que le ha visto a la chica. La verdad es que algunas frases que ha puesto chirrían.
ResponderEliminarEstoy leyendo el último del admirado Olmos (al menos por estos lares), voy more-less por la mitad, y he de decir que está interesante, me está gustando. Otra cosa es que alguien la quiera vender como obra maestra y similares.
Me comentan que Pron, una vez enterado Luna lo habia dejado con Ory, habia conseguido una cita ciega con ella en el Pepe Botella (malasaña). Alli discuten la conveniencia de crear la nueva novelística nacional, y firman el manifiesto Madriz. Pron se encabrita con la chica y se hace ilusiones. Luna se habia quejado de compartir habitación con un alien ocupado en descifrar significaciones ocultas en la obra no traducida de Foster Wallace. Pron, además, es viajado e internacional, como Luna. La cosa no cuaja, y Pron se lanza a un casamiento segoviano (en homenaje al Olmo...) Luna hace la malera y se marcha al Raval. Este año no hay bus subvencionado a la Laboral y el alquiler en puerta de Toledo se ha puesto carito. Pron, malherido, prepara la crítica al Olmo, ya que la novela de Abdullah, tiene título -"Esta sí que es la verdadera broma final, y no la que escribió el del pañuelito"- pero no fecha de salida. Luna está herida, como el Olmo, a quien envia unos güasaps de condolencia desde el Iphone.4. El Olmo, por fin, ya tiene su Iphone, él también. A veces, a menudo, sale más económico un buen revolcón, que un sms a destiempo. Pero eso, ellos, no lo sabían.
ResponderEliminar(to be continued)
Son ustedes adictivos.
ResponderEliminarCarlos, me perdonarás, veo cosas que no debiera. ¿Poner en etiquetas Violad en vez de Viola es una insinuación? ¿Quieres que hagamos algo por ti?
ResponderEliminarEs que soy nuevo,
Crepus
Je. Todavía no.
ResponderEliminarBuena vista. Gracias.
Estoy alucinada.
ResponderEliminarAquí me entero de que Patricio Porrompompon ha hecho una reseña muy dura a lo último de Olmos. ("salvaje" la llama Ibrahim B.) Me meto en los comentarios del blog de Porrompompon y encuentro que una tal Luna, después de disentir, escribe: "Ay. Ojalá habláramos de esto en el Pepe Botella y no por Internet". Que vale, que puede que esta no sea Luna Miguel, que pueden ser neuras mías, pero ¿no parece esto un poco sospechoso? ¿Le está diciendo Luna a Patricio algo así como que la próxima lo hablamos antes con una caña por medio y seguro que después no lo ves, el libro, tan feo? ¿Luna Miguel no trabaja ahora en la central de Mondadori en Barcelona?
Lo que hay que ver a mis años.
La sargento Margaret
Pero mira que llegas a ser malo, Patri. Es que el Porrompompom se ha pasao tres pueblos, oigan. Cachis...
ResponderEliminarAntes de nada, Carlos, te pido disculpas por el comentario que estoy a punto de hacer; más que nada, por si algún anónimo ofendido decide salir con cuchillo y cachiporra. También me disculpo por el palabrerío largo e infame que voy a soltar, pero tengo deformación profesional de profesor de Filosofía y resistirme es imposible. De verdad que lo siento, por el asunto de la pedantería y también por aburrir gratuitamente. Podríamos disertar largamente sobre la estúpidez de la niña esta acerca del lenguaje, recordando, por ejemplo, que las palabras se definen como tales en virtud de su capacidad de significar, de referir, y cuando se construye un código abstracto en el que los símbolos no significan, en el que carecen de contenido material, lo que se construye es un cálculo, un lenguaje formal, una herramienta de investigación para poner de relieve las estructuras profundas del lenguaje y las leyes de la lógica; lo último que se pretende es que signifique algo, que transmita información. Eso es lo único que puede hacerse para "despojar a las palabras de su significado y de su carga". No existe tal punto cero lingüístico como el que pretende muestra niña, joder. ¿Cómo vas a emplear una palabra sin un significado previo que la defina y acote la realidad, concreta o abstracta, a la que se refiere? ¿Pero no ve nuestra lánguida niña que, entonces, lo único que haría es coger de nuevo ciertas marcas, ciertos signos, para volver a asignarlos a determinados objetos, y estaría de nuevo en lo mismo, como todos los demás escritores y seres humanos del puto planeta pero que nadie la entendería porque su código no sería compartido, intersubjetivo?
ResponderEliminarAsí, su genial rebeldía lingüística consistiría, por ejemplo, en coger la palabra "elefante" y con su suprema libertad de creadora chorri-postmoderna, unirla al objeto que solemos llamar "botella". Y ya está. Por lo que he podido leer, ni siquiera llega a eso, sino que simplemente se contenta con unir palabras que le parecen rompedoras desde un punto de vista estético, sin crear significado alguno, como lo del ocaso porno de los cojones... De verdad, es que Alpha Decay es una catedral de la estupidez y la pose barata más recalcitrante... Los anónimos estos que campan por aquí llamando abuelo a Carlos, o acusándolo de redactar la crítica movido por antipatías personales, no sólo es que no entiendan nada, sino que están claramente sonados. No necesitan objeciones o argumentos en respuesta; necesitan tratamiento. Y urgente. ¿No se dan cuenta de que el autor del blog no se mete en jardines literarios, precisamente por el bien de la niña? Si se la juzgara desde un punto de vista literario, la única conclusión posible sería despellejarla para ofrecer su carne en sacrificio a nuestros oscuros y viejunos dioses de la literatura verdadera, como Dosto o Chejov, por poner un ejemplo rusófilo. Los criterios mediante los cuales juzga la literatura esta gentecilla dan miedo o risa, no sé muy bien. Sólo podemos esperar que la literatura en condiciones, mal que bien, pueda proseguir su camino a través de esta época esperpéntica. Si lo consigue, que yo creo que sí, no será por Alpha Decay y sus seguidores gafapásticos. Y por cierto, a mí me ha interesado el taoísmo como sistema de pensamiento y cosmovisión. Resulta complejo y estimulante, esa es la verdad; y tengo claro que si yo entendí poco, la Viola todavía menos...
ResponderEliminarPues yo me fiaría más de Pacchiano, uno de los críticos más serios y reputados del momento en Italia, que ha escrito esto sobre la novela: “È un libro fatto di segni del destino il notevolissimo romanzo d’esordio di Viola Di Grado, Settanta acrilico trenta lana. In quest’inizio d’anno, mentre gli editori puntano molto sugli esordienti, ingolositi dai grandi slam di Giordano e della Avallone, lei, i romanzi dei suoi concorrenti, li eclissa. Se c’è giustizia al mondo, farà piazza pulita ai premi“. Me fío más de este crítico que de todos los cientos de indocumentados que pululan por este blog.
ResponderEliminar¿Disculpar? ¿Bromea? La única razón por la que no he mandado más de cien veces este blog a hacer puñetas ha sido (y sigue siendo) por comentarios como este. Muchas gracias, Daniel.
ResponderEliminarRespecto a esta niña... la verdad es que había pensado profundizar en algunos detalles sobre su escritura pero me costó mucho esfuerzo acabarme las 60 páginas, muchísimo, y la sola idea de repasar para buscar "momentos" se me hacía insoportable. Al final preferí dejar que se descalificase ella misma. Y lo que me callé y que está al alcance cualquiera en la página del libro en la editorial: que si a veces se olvida de comer porque está hablando de literatura con su madre (ojo: lo destaca ella como algo digno de elogio); que si su padre no las entiende porque el no sabe construir personajes (su padre es profesor de literatura); que si se quiere ir a Islandia para estar sola.... NO necesito leerle a esta niña ni una página de lo que escriba porque se ve a todas luces que no tiene ni puta idea. Y también la editorial se califica a sí misma editándola.
Si este fin de semana me pillan con tiempo recopilaré algunos momentos estelares y los comentamos.
Nuevamente gracias a todos.
Será una cuestión de competencia, pues. Todo relativo, como siempre.
ResponderEliminarPues yo no me tengo que fiar de Pacchiano (si acaso para comprar el libro antes de saber nada de él) porque lo que he leído no me gusta. En Europa se hacen también cosas muy raras no se crea. Pero oiga, si usted se fía de Pacchiano cojonudo. Yo es que ya no me fío ni de mi padre.
ResponderEliminarSeñor Tongoy, ¿usted ha dejado ese comentario en el blog de Pron? No es su estilo (y tampoco nada grave). ¿Será que los hackers de Sergi Bellver existen y ahora van a por usted? Y hablando de las ocurrencias de esta niña, ¿cambiar el significado de las palabras? ¿o sea que ahora "chapuza" va a significar "silla", y "silla", "Alpha Decay". ¡Dios!
ResponderEliminarNo sé de qué comentario habla pero no, no he escrito nada allí. Luego lo miro.
ResponderEliminar¿Y por qué fiarse de Pacchiano, así, a priori, sin atender a nada más que a su título de crítico? ¿Quién expende tal título? ¿Se han fijado en los críticos de aquí? ¿Los de Italia son mejores? Es decir, ¿Están menos comprados? ¿Por qué sacrificar el sentido común y un gusto formado a lo largo de años de lectura por un señor vendido a una editorial, por muy crítico que sea? Y no me salga con el asunto de que, entonces, por qué habríamos de fiarnos del autor del blog, y tal. Resulta que a Carlos no le pagan por esto ni intenta vendernos nada, lo que es, a todas luces, un buen comienzo para la crítica. ¿O no?
ResponderEliminarAhora resulta que el trabajo, si es remunerado, es indigno. Lo que hay que oir. Buscaba una iglesia y ya la encontré.
ResponderEliminarPóngase como quiera, sabe perfectamente a qué se refiere.
ResponderEliminarLa edad no es indicadora de nada mas que de los días que has pasado por aquí.
ResponderEliminarLa intensidad o la lucided con que lo hagas puede darte o quitarte madurez a los ojos de los demás.
Carlos, creo que te has pasado un pelín con lo de la edad a la hora de valorar la calidad de un autor. Yo también estoy un poquito hasta las narices de que las niñas vengan a darnos lecciones de vete tú a saber qué de la manita de sus superagentes literarios y arropadas con la mantita del márketing de la editorial que toque, pero de ahí a generalizar...
Vamos, que creo que no todos los jóvenes son imbéciles aunque alguno muera en el intento. Lo que sí es cierto es que la mayoría son ingenuos. Son presa tierna y fácil para un mercado editorial que cada vez es mas tragón.
Y aunque estoy contigo en que yo a esta Viola no me la como, estoy segura de que habrá siempre alguien joven que tenga algo interesante que decir y que además nos lo diga con calidad.
No, no es indigno, pero es una cuestión de intereses, como ha quedado claro en el episodio del Olmos. Todos con aspavientos 'pero qué dices, pero qué dices!' Penita pena.
ResponderEliminarPor fin alguien me ha desenmascarado... Sí, soy un hombre de la Iglesia. Un inquisidor torquemádico que, presa de su ceguera fanática e intolerante, se empeña en perseguir la muy legítima actividad de recibir pasta suplementaria de una editorial para disfrazar la apología de un producto de crítica literaria (por supuesto, hipersesuda e intelectual de la muerte). A eso me refería; no deberían confundirse las cosas: la profesión de crítico ha estado ahí de toda la vida, pero una cosa es ganar un sueldo por publicar crítica literaria en una revista especializada, un suplemento cultural o lo que sea, y otra bien distinta recibir dinero (o especie) de la misma editorial que edita el libro que tú estás criticando, para alabarlo sin cuento... Lo único que digo, como señalaba Carlos, es que el crítico, si pretendemos una crítica literaria sincera, no debería formar parte del proceso de mercadotecnia que conduce el producto al mercado y al comprador. Y lo dejo ya, que a mí tanta jerga capitalista no me va, que me pongo muy pesado, que necesito dormir y, sobre todo, porque no era necesario aclararlo. Si es que, en el fondo, me gusta mucho escucharme...
ResponderEliminarjoder, leer los comentarios es casi mejor que leer el post! de lo que se entera uno! así que Pron se la mete pron detras a un Olmo en una noche de Luna llena... iré e ver... yo empecé la última del Olmo y se me cayó antes de la página 60, tanto literaturizar, tanto Umbral mal digerido... y el caso es que muchos post los borda el tío, a veces, querer escribir bien, es la mejor manera de cagarla.
ResponderEliminaren cuanto a la afirmación de que habría que prohibir que la gente escribiera (o publicara) si tiene menos de 30 años:
Edad a la que publicaron su primer libro:
Pere Gimferrer 18
Pablo Neruda 19
Claudio Rodríguez 19
Octavio Paz 19
Rainer María Rilke 19
Federico García Lorca 20
Leopoldo María Panero 20
Ruben Darío 20
Luis Alberto de Cuenca 21
Luis García Montero 22
Wislawa Szymborska 22
Miguel Hernández 23
Jaime Gil de Biedma 23
Rafael Alberti 23
Walt Whitman 23
Ezra Pound 23
Jose María Fonollosa 23
Nicanor Parra 23
Gerardo Diego 24
Roger Wolfe 24
Luis Cernuda 25
Jose Ángel Valente 25
José Hierro 25
John Ashbery 26
Jose Manuel Caballero Bonald 26
César Vallejo 26
ee cummings 29
por otro lado, el ejemplo de luz porno y nubes sanguinolentas es ya para mear y no echar gota. Animalico.
Danilo, coño, que tú estás hablando de escritores...
ResponderEliminares verdad! perdón, perdón!!!
ResponderEliminar:)
Hay que distinguir entre el cerebro del poeta, joven, como los ejemplos que dicta Danilo, y el del escritor, que suele triunfar cuando viejuno. Es un hecho científico y por tanto, impepinable.
ResponderEliminarVarias cuestiones, Daniel N."cuando se construye un código abstracto en el que los símbolos no significan, en el que carecen de contenido material, lo que se construye es un cálculo, un lenguaje formal, una herramienta de investigación para poner de relieve las estructuras profundas del lenguaje y las leyes de la lógica". Me viene a la cabeza el Fineas Wake de Joyce como paradigma de lenguaje inventad. ¿Cómo podría usted aplicar su definición previa a esta novela? ¿Joyce quiso poner de relieve las estructuras profundas del lenguaje y las leyes de la lógica?
En cuanto a la escritora que nos ocupa, celo, entreveo en todos ustedes, un poco sí, no lo nieguen. La niña tiene ya su libro, lo que muchos de nosotros no podemos ni decir. Le faltan el árbol y el hijo, lo que yo, estéril hasta la médula y aborrecedor de la horticultura y jardinería, no podré decir jamás. La niña no come porque habla de literatura con su madre. Bien, aquí también se ensanchan sus egos a gusto, anónimos y autores de blogs, en un ejercicio de vanidad intelectual en lo que supone descalificar al resto, ojo, ejercicio que me apasiona, no se vayan a creer, pero vanidad al fin. Si yo tuviera mi librito con 23 también diría estupideces similares, joder, es que no dejáis pasar ni una. Además, Míster Tongoy, ¿desde cuándo uno atiende a las afirmaciones de tal o cual autor para considerar su obra digna o no de elogio? Si las antipatías me impidieran ver la obra genial, no habría podido yo leer a Thomas Mann, a Borges, a Vargas Llosa, etc, etc. Por lo pronto, ha conseguido usted que corra a comprarme este libro. Me da que la niña tiene más de poeta que de novelista.
Querida Conchita:
ResponderEliminar¿Supone algún mérito hoy en día tener un libro publicado con 20, 21, 23 años? La respuesta después de la publicidad.
No, si yo hablaba del hecho de tener publicado un libro, así, sin más. Y sí, a los 23 el mérito consiste en tener más larga vida para alardear de ello.
ResponderEliminarEn eso estamos de acuerdo. Hay que aprovechar para publicar algo entre los 15 y los 40, que en esta franja se publica con facilidad. No hace falta ser demasiado bueno. Si no has publicado hasta los 40, a partir de ahí lo llevas más jodido. Te exigirán un mínimo. O sea, que dense prisa los menores de 40, que el tiempo pasa volando.
ResponderEliminarSaludos, Carlos.
ResponderEliminarEl problema que veo por aquí es que no sé muy bien a qué genero pertenece esta obra. Supongo que cabría calificarla de narrativa poética y, si esto es así, no tiene ninguna oportunidad en este blog y, en ese sentido, la reseña debería haber empezado, llanamente, por ahí.
Por otra parte, respecto al comentario del profe de filosofía -Daniel Nehmovic-, el cual me ha interesado mucho, me gustaría decir que no estoy de acuerdo con su conclusión, muy a pesar de que le doy casi toda la razón en la argumentación previa. Es decir, no creo que esta chica haga nada nuevo al utilizar palabras para referirse a objetos distintos de aquellos a los que suelan hacerlo y, por ello, tampoco creo que se pretenda hacer algo imposible ni que se caiga necesariamente en una paradoja por tratar de dar nuevos usos a las palabras. Mucho menos pasa algo porque a uno le de por jugar con ellas, porque se haga un eso meramente formal o estético: ¿desde cuándo esto es algo que no se puede hacer en literatura? Hay narraciones, poemas, que expresan sensaciones más allá del significado que, de hecho, tienen sus palabras, precisamente gracias al uso que de ellas se hace. Eso está, así a bote pronto, en Lorca, por ejemplo.
Lo importante es divertirse, también en literatura, amigos, y hay muchas formas de hacerlo.
Polémica, por favor.
Eso que comenta Peri está muy bien. Se tiene la idea - falsa- de que en poesía todo vale, que "cambiando" el significado de las palabras, juntando unas con otras de manera que resulten chillonas, ya se está haciendo poesía. Nada más falso.
ResponderEliminarDe hecho, los surrealsitas utilizaban palabras con distinto significado para referirse a ciertas situaciones.
ResponderEliminarPero claro, la cosa está en que se haga bien,
Sí, lo del "surrealismo" también es un filón.
ResponderEliminarHipálage: Figura consistente en referir un complemento a una palabra distinta de aquella a la cual debería referirse lógicamente. Ej. El público llenaba las ruidosas gradas. (Lo lógico hubiera sido "El ruidoso público llenaba las gradas, en tanto que gradas es inanimado y estático y, por sí mismo, no puede ser ruidoso).
ResponderEliminarNo se trata de que tenga 'sentido', la poesía precisamente intenta crear nuevos sentidos a través de las sensaciones, como ese ejemplo. El problema es cuando solo se consiguen fuegos de artificio o, en el peor de los casos, un petardo.
ResponderEliminarEstá claro, Inmaculada. Pero hay quien piensa que estas figuras poéticas no tienen cabida en narrativa.
ResponderEliminarEn cualquier caso, un tema de discusión complementario en esta entrada sería si la obra de esta chica es, en realidad, una novela. Porque esta cuestión si que me agarra los nervios: todo se presenta como novela con tal de subirlo al carro de las ventas.
Saludos.
No se trata de que no quepan en narrativa las figuras poéticas, sino de que estén bien buscadas, bien logradas y sean pertinentes, no de forma arbitraria para despistar la atención, o ni siquiera eso.
ResponderEliminarSaludos
Perdón, pero ¿puedo decir que me gustaron los libros de Denton Welch, Fabián Casas, Jim Dodge y Delmore Schwartz? También están en el catálogo de Alpha Decay, pero no interesaron mucho a los medios. Por lo visto, tampoco a los blogs. Me encanta dedicar mañanas enteras a leer cómo van poniendo a parir por ahí libros, autores y editoriales, es como entrar en el chat de un Gran Hermano con ínfulas, me río mucho. Por eso agradezco que aparezca carne fresca, y Alpha Decay nos sirve esa carne un par de veces al año, ¿por qué os quejáis? No es como otros sellos, mucho más consolidados, que sacan autores ya un poco marchitos como si fueran un gran descubrimiento; luego, como ven que no venden nada, dejan de contratarlos. El mérito de las editoriales independientes es que han obligado a las grandes a ponerse las pilas, y si echamos un vistazo a lo que se ha publicado últimamente, hay cosas mil veces más terribles, lo que pasa es que ya lo sabíamos. Además, ¿no lamentábamos hace unos años que siempre publicaban los mismos? No creo que nadie espere forrarse descubriendo a jóvenes portentos más románticos que posmodernos, son demasiado frikis para el gran público. Los autores tienen que pensar en la obra, y los editores, en el producto; el problema es que últimamente todos están demasiado pendientes de lo segundo. Me parece genial que nos desaconsejes la lectura de Viola di Grado; dirás que quizá necesitábamos tu advertencia, hipnotizados como parece que estamos por una suerte de religión hypster alphadecayana, pero yo por principio no me compro el libro de un cantante, un actor o una chica que se pone orejas de mapache. Ahora, entiendo que salgan en los periódicos. De ahí a que te bajes de Alpha Decay... no sé, es como bajarse de Acantilado por David Monteagudo (ironía, pero me niego a poner un emoticón).
ResponderEliminar¿Me he perdido algún escarceo previo entre Pron y Olmos? O esto va de que Pron se enemista con todos los escritores de su generación. Ya había chocado antes con AFMallo, Elvira N, VLM...
ResponderEliminarPor cierto, también agradecería una explicación sobre las posturas personales/profesionales de dos implicados en el fuego cruzado:
1. ¿Cómo va a solucionar Luna lo de su cumple, invita a ambos a riesgo de que se arrojen las patatas y la cocacola?
2. ¿Qué debe hacer Claudio, darle un toque a Pron o un empujón a Olmos?
Lo de las ínfulas está muy bien, pero se nos podrá acusar de cualquier cosa menos de eso o ¿ha visto alguna firma reconocible por aquí? Las ínfulas mejor guardarlas para los que aconsejan sin saber solo porque va con el puesto. Eso sí, la firma de puño y letra es lo que cuenta. Garantía, tú.
ResponderEliminarPues yo encuentro aquí una prueba de escritura más que notable: http://alphadecay.org/system/files/1403/original/Adelanto_Setenta_acr%C3%ADlico_treinta_lana_-_Viola_Di_Grado.pdf?1317124286
ResponderEliminarCoincido con el anónimo de las 14:07, señor Tongoy. A pesar de los continuos fiascos, no hay que vetar explícitamente a ninguna editorial (aunque en los hechos esto se haga continuamente porque no se puede leer todo). Quizás alguna vez Alpha Decay publique un buen libro; es más, por posibilidad estadística, esto seguramente ocurrirá (suponiendo que el sello sobreviva al menos diez años más).
ResponderEliminarLos cuentos de Fabián Casas están bien; lástima que la edición argentina ha llegado a España antes que la de AD. Las crónicas y ensayos, que también tienen su gracia, ya están también en algunas librerías en la edición argentina. Ahora, afirmar, como algunos hacen, que Fabián Casas es un gran escritor tiene algo de absurdo, ya que no es precisamente un mozalbete y sus obras narrativas completas (no estamos hablando aquí de poesía, aunque la suya también esté sobrevalorada), consisten en cien páginas. Es, simplemente, a sus 46 añitos, el autor de siete buenos cuentos (sobra aclarar que no es Rulfo ni Salinger).
Pues sí, es exactamente lo que parece: otra mamarracha veinteañera con ínfulas jugando a ser escritora.
ResponderEliminarAnónima 14:08h
ResponderEliminarSi Pron ya la habia liado con los que mencionas, mejor me cae. Esa pandillita es pa meterlos en un bus rumbo a nowhere.
No es noticia que Ana Pareja tenga mal gusto. No hay más que ver cómo viste.
ResponderEliminarHola de nuevo. Esto va que da gusto, desde luego. Me encanta comprobar que todavía queda gente que piensa sobre el lenguaje. Inmaculada Concepción plantea unas dudas sobre el tema del lenguaje inventado, que son muy interesentes. A ver, lo que yo afirmaba no es otra cosa que lo siguiente: la niña esta viene a decirnos que ella ha despojado las palabras de todo significado previo, de toda su carga, y que así las reinventa. Bien, si haces eso, ya no tienes palabras sino marcas, dibujos, sonidos o manchas de tinta, lo que prefieras, pero no palabras, porque una palabra se define por significar. Lo que hace Joyce es bien distinto; él parte del significado original del término y lo altera, lo dota de nuevas asociaciones, le aporta densidad semántica o se la quita, depende del asunto, y trata de incrementar la potencia del lenguaje para que éste cubra también ciertas regiones de la conciencia, como las sensaciones, o las asociaciones caóticas de imágenes y disposiciones sensoriales, que habitualmente caen en el terreno de lo inefable. Nuestra Viola, por continuar, pretende, sin embargo, que esas marcas, esas "palabras" vacías, que le han quedado después de despojarlas de todo significado y carga histórica, sorprenderán a propios y extraños al ser asociadas a otros objetos y realidades, constituyendo esto la quintaesencia de su arte literario. Y yo digo que sí, que me sorprendería, a mí y a cualquiera, que la marca o signo "elefante" fuera asociada de repente al objeto "botella", pero que esto no es arte literario, y además, que no habría de admirarnos demasiado porque la marca o mancha "elefante" ya no tenía significado previo, o sea que la sorpresa y extrañamiento en el lector no debería ser mayor que si yo, por ejemplo, llamo a las piedras "fildurcios".
ResponderEliminarRespecto al tema del lenguaje formal, lo que quería decir es que resulta imposible despojar las palabras de su significado y pretender que sigan significando, es decir, que cuando históricamente se ha hecho tal cosa se tenía en mente el objetivo de contemplar el lenguaje en tanto estructura formal; es decir, quedarnos con un conjunto de símbolos vacíos pero relacionados entre sí formando una estructura, para examinar y enunciar los modos en los que se relacionan, las leyes regulares que muestran y los procesos que siguen sus interacciones y todo lo demás. Me refería a que esa es la única forma conocida en este planeta, y en lenguaje humano, de despojar de todo significado a las palabras. El lenguaje creado por Joyce presupone una significación previa para construir otra, quizás arcana o dificilmente comprensible, pero significación al fin y al cabo, aunque el mejor ejemplo para ilustrar nuestra conversación sea el glíglico de Cortázar, que también presupone una significación, aunque compartida sólo por dos hablantes, la Maga y Oliveira. Y a Peri Lope le digo que, en realidad, estamos de acuerdo. Eso es lo que yo quería decir originariamente: no pretendo que se caiga en una paradoja, sino que afirmo que al dar nuevos significados a las palabras, siempre se parte del significado previo que ya tienen, sea para negarlo, ampliarlo o deformarlo o lo que sea. La poesía, ya lo sabemos, consiste, entre otras cosas, en esto. Sin embargo, dar nuevos significados a una palabra no consiste en ignorar el que ya tienen, o extirparlo de ellas, pues entonces, lo que tenemos son manchas, sonidos o marcas, y daría igual inventarse otros. ¿Por qué, si quiero designar una "botella", he de hacerlo con la mancha "elefante" y no con la de "espolendra"? Si he vaciado "elefante" de su significado previo y toda su carga histórica, ¿Qué más me da inventarme otra mancha o sonido para designar botella? ¿No entiende la niña que eso es lo mismo que inventar una palabra nueva, y no emplear megapoéticamente la palabra "elefante"? ¿De verdad resultará tan poético mantener "elefante"? ¿Por qué? En fin, que conste que toda esta discusión bizantina me apasiona, y agradezco mucho que existan ustedes, gentes civilizadas y cultas que todavía nos ofrecen el placer de la discusión, pero que la niña esta no merece ni tres palabras seguidas; es una adolescente, con ínfulas de adolescente, que va soltando chorradas, aprovechándose de que la tradición literaria sí está llena de escritores que experimentaron para crear nuevas cosas, y espera quedar como continuadora de los mismos, o, al menos, disimulada entre ellos.
ResponderEliminarEl País parece obstinado en convertirse en un periódico (más) estúpido. Hoy entrevista a esta niña: "Di Grado luce vestido a topos de hechuras decimonónicas, colgante XL y guarda en una bolsa, junto al pintalabios gótico, una diadema con cuernos que reserva para cuando aparecen los fotógrafos." ¿En verdad no hay escritores más interesantes a los que entrevistar?
ResponderEliminarPor cierto, la madre de Viola es también escritora...
Gótica, enchufada, obsesiva por las fotos y de talento cuestionable. ¿A quién se parece?
¡LUNA!
ResponderEliminarEs un poco patético ver cómo rabiáis por la más ridícula anecdotilla que sale cualquier sitio. ¿Por qué no hacéis como Javi Marías y os sentáis en vuestro sillón de cuero a leeros a Chespir mientras os tiráis cuescos con solera?
ResponderEliminar¿De verdad os preocupan estas gilipolleces?
Buenas. El viernes le dije a Carlos que no iba a entrar aquí porque ya imaginaba lo que iba a decir de la Viola y su libro después de que anunciara en facebook que abandonaba su lectura porque le había resultado/parecido “insufrible” (él lo escribió con guiones). Vaya por delante que yo a Carlos lo aprecio como a un hermano porque, entre otras cosas que no vienen al caso y a ustedes no les interesan, fui quien de alguna manera le di pie a que expresara sus cuitas y alborozos literarios a través de un blog y no en un foro donde nadie le hacía ni puto caso.
ResponderEliminarPero al final la curiosidad me pudo y entré y leí y me partí el culo de risa con las cosas que decía, como siempre, y me suscribí a comentarios para comprobar qué escribirían ustedes, anónimos y avatareados y autonominados. Y resulta que, como dice un anónimo más madrugador, es más interesante, no, más interesante no, más cachondo, pero mucho más cachondo, lo que dicen ustedes que lo que Carlos escribió para dar pie a toda la fiesta habitual. Es fantástico lo mucho que se puede escribir y opinar sobre un libro sin haberlo leído. De veras, es digno de estudio y “antología” (ya saben a qué me refiero…). (Y también de antrología y de antropología.) Y es que Carlos tiene lo que se denomina olfato para dar pie. Ardo en deseos de que lea o intente leer y no pueda “Ejército enemigo” y diga qué le parece, sin ambages ni paños calientes, a lo Pron pero a lo Peón (echando mano de su toque especial que tanto nos pone, “Olmos à la Tongoy” tal que “Viola à la española”), con gracia y sin cosmovisiones; ganas de que adjetive y califique la obra de Juan Sin Miedo para, independientemente de la dirección que adopte su pulgar neroniano, leer sus comentarios, los de ustedes. Interesa mucho más lo que ustedes tienen que decir sobre la literatura que no gustan que de la que gustan, de la que leen que de la que no leen. A nadie le importa si a Carlos le entusiasma “Dosto” o Chéjov, o si es capaz de desentrañar los matices ontológicos de Houellebecq o, por el contrario, pasa de largo o escapa de ellos como Caperucita del Lobo. Lo que de verdad apasiona son los asuntos del día a día. De eso no hay forma de escapar. Joder, cómo engancha la caña si no es de azúcar.
No quiero ni pensar que muchas de las cosas que se derraman aquí las cause la envidia. No, por favor. Porque la envidia es humana y los dioses están exentos de ella (a no ser que sean griegos pero ustedes no lo son, por lo que se lee). Sigan discutiendo sanamente, con esa rubicundez que les caracteriza, que aquí tienen a un fiel lector abonado a sus letras.
Suyo,
Hola socio. Te echaba de menos. Yo el de Olmos de lo leo enterito aunque me sangren los ojos y pierda extremidades en el intento.
ResponderEliminarMe he quedado sin tiempo, lo siento. Mañana participaré del debate que está siendo apasionante. Sólo una cosilla insingnificante: Viola afirma en la entrevista de El Pais que muchas veces de tanto cuidar las frases (y supongo que reconstruir el significado y el significante que perdían cada minuto) se olvidaba del argumento de la historia. Tengo que reconocer que yo tuve la misma sensación: de que la novela se le escapaba por todas partes.
Ayer volví a intentarlo (leerla) y casi de pongo de mal humor. Y digo yo que eso no puede ser bueno.
Saludos y todos y muchas muchas gracias por el estupendo debate que están creando. Voy a tener que ponerles una nómina.
Pero coño, Carlos, echa un duro más en la cabina, que ahora soy yo quien tiene tiempo. Cago'ntó.
ResponderEliminarEntonces ¿hubo gatillazo también ayer? Vaya que lo siento. Es lo que tienen estas niñas modernas (no sé cómo sigues fiándote de lo que transcriben los periodistas españoles, esos capullos becados con una tapa de tortilla a la semana y agua de la cisterna, sabiendo la de hackers que pululan por las redacciones con el único afán de "alterar el sentido de las palabras") con los maduros, que los dejan secos. Prueba con el magiclick, a mí me funcionaba para las máquinas de marcianitos.
Seguimos entonces mañana. Voy a ponerme a leer redacciones de primaria, nunca se sabe dónde aparecerá la próxima estrella de la crítica.
"Literatura NETA"
José Luis, somos semidioses. Con eso nos conformamos, mira tú qué poco.
ResponderEliminarBien, semiaguado o lo que sea. Pero sigan, sigan, no se corten.
ResponderEliminar(Me dicen por mail que hay una errata en mi comentario de las 17:21. Gracias, X. Done dije que [interesa mucho más saber qué opinan] "de la [literatura] que leen que de la que no leen", en realidad quería decir que "interesa que den sus opiniones sobre aquello que NO HAN LEÍDO". Por favor, no queremos saber qué les gusta con fundamente, sino qué no les gusta sin él (fundamento).)
Fascinante, de verdad.
¿Pero cómo vamos a leer a alguien que se autoproclama "el sueño erótico de nosécuantos", o que se ampara en los ositos suicidas de los cojones, o que una de sus imágenes es la de las "nubes carnosas y sanguinolentas"? Todavía no he bebido lo bastante, yo. Sorry, pero paso. Luego, si quiere, me lo cuesta Vd.
ResponderEliminarSaludos
cuenta, perdón.
ResponderEliminarPues, miren, la verdad es que Jose Luis tiene algo de razón; no hemos leído el libro de la niña. No obstante, Jose Luis, piense que no apetece mucho después del pequeño resumen de Carlos. Y, bueno, yo hablaba de la concepción del lenguaje de la niña esta, que, al parecer, es fundamento de su poética y estética particular. No hablaba, en realidad, de su libro. Me reafirmo, además, en que me parece ridícula... Un saludo a usted y a Carlos, con todos mis respetos.
ResponderEliminarPerdón, cuando dices que se autoproclama "el sueño erótico de nosécuantos" hablamos de Olmos ¿no?
ResponderEliminarjaja, también, también.
ResponderEliminarEs que yo del criterio de Carlos me fío mucho, en serio, menos del literario, de ese nada (él lo sabe y sabrá, también, perdonármelo; además es recíproco; en paz estamos y quedamos). Él dice lo que no le gusta y la basca entra al trapo. Así es la basca.
ResponderEliminarNo pretendo que nadie esté de acuerdo conmigo, estimado Daniel, sólo aspiro a expresar mi aburrimiento igual que ustedes el suyo. Precisamente ahora estoy empezando la novela de Viola (aún no me pidan opiniones, no).
De la niña no hablo, ni de lo que dicen que dijo la niña, pues no me fío. Tengan en cuenta que no conoce España. A saber la de catetos que se le habrán arrimado...
En fin, sigo leyendo.
Perfectamente respetable, José Luis, pero "alguna" basca entra al trapo, forma parte del juego. Otra no. Hay basca para todo. Otra con (o sin) conocimiento de causa aprovecha la magnanimidad de Carlos - joder, suena de muerte eso- para expresar libremente su opinión, insisto, justificada o no. Yo intento justificar lo que digo, pero paso de dogmas. Solo por eso Carlos ya me merece todos los respetos. Más que muchos críticos que han hecho un par de asignaturas universitarias - ¿humanidades? - .
ResponderEliminarSí, a mí también me merece Carlos todos los respetos, que quede claro. Su criterio también es respetable (el sí/no neroniano), y si a ti te parece didáctico, bien que le haces y un peso que te quitas, el de ver y opinar por ti mismo/a.
ResponderEliminarDel tuyo no sé qué decir, Anónimo, te prodigas mucho y dices cosas "encontradas". En todo caso también es respetable, tu criterio. Mejor que no tener ninguno es tener varios.
Bueno, lo de prodigarse es muy relativo. Ya sabes, un anónimo no es nadie y lo son todos. Y lo del criterio, pues igual. No hay criterios únicos ni inamovibles. Malo, si no.
ResponderEliminarJosé Luis, por la fina ironía de tus comentarios, intuyo que a ti sí te puede llegar a gustar el libro... Yo tampoco suelo coincidir con los gustos literarios de Mr. Peón, pero es que se aprende mucho con los comentaristas, la verdad. Yo ya digo, esta tarde he ido a encargarlo, precisamente porque si a Mr. Peón no le ha gustado nada de nada...a mí p robablemente me guste.
ResponderEliminarProfesor Daniel N. un placer leerle.
Y es que yo ando escribiendo un libro donde también despojo al lenguaje de su significado para dotarlo de otro, ya verán, les aseguro que les encantará cuando tengan a bien publicarlo.
Evidentemente la envidia es uno de los motores más poderosos de nosotros, los anónimos. Y también de los no anónimos, por cierto, que no soportan que alguien tenga portadas y ellos no, que no toleran que alguien escriba una novela más interesante que la suya (que los saben en el fondo) y tienen que salir a recordar que ellos son más inteligentes, aunque sus libros los desmientan. Me desvío. Porque por más que no me guste la obra de Pron, compararlo con Viola es un absurdo; Pron es un escritor interesante. Olmos también. Y Carrión y Menéndez Salmón. Y Javier Moreno y Vicente Luis Mora y AFMallo y Vilas son escritores, aunque la mayoría me parezcan deleznables son escritores, pretenden hacer literatura, algo de lo que están muy lejos los "autores" de Alpha Decay.
ResponderEliminarPero los anónimos también somos de vez en cuando la única voz con sentido común en tiempos en que la crítica oficial se acerca cada vez más al ridículo, hundiéndose en el fango de la falsa exquisitez (a la Impedimenta) y en los pantanos del populismo literario (ver hoy la portada de Babelia).
Y tal vez haya casos en que la envidia no sea nuestra motivación. Quizás hojeamos el libro de Viola, quizás hasta lo leímos, quizás pensamos que es una bazofia manifiesta y nos parece ridículo que se le dedique tanto espacio en prensa a una tontería (y no a escritores españoles con obra, sin nuevos dramas), y quizás no hemos caído tan bajo como para lamentar que nosotros no tengamos una diadema con cuernitos.
No todo es envidia; al menos el rechazo a la estupidez no lo es.
El señor Tongoy, por cierto, es también uno de los pocos lectores públicos que quedan con sentido común. De ahí la animadversión que provoca.
ResponderEliminarPor más que cometa faltas ortográficas y que varias veces no coincida con sus juicios. Siempre es un placer leerle, por lo agradable de sus reseñas, por su independencia y por su criterio. Por gritar que el rey va desnudo (muchos mejor que sargentos varios).
C-R-I-T-E-R-I-O.
De animadversión nada, ve usted fantasmas.
ResponderEliminarCarlos, ya he llegado a la página 70... ¡Y HE SEGUIDO! He pasado al ¡¡¡NIVEL DOS!!! No os preocupéis, cuando termine la lectura os digo de qué va el resto (lo que Carlos ha dejado sin leer porque le ha resultado imposible, GAME OVER).
'nas noches.
Joselu, lo que nos interesa es saber si te ha gustado o no, cuánto en caso afirmativo, y los porqués de tu juicio.
ResponderEliminarPrometido. Pero aviso que lo que ha empezado en interruptus puede acabar en orgasmo.
ResponderEliminar"La niña acrílica tenía-tuvo-tendrá una lengua lenguaraz de setenta por ciento lana, adherida de poluciones góticas, estaciones de metro, tabaco turco de liar y etcéteras griposos. La niña acrílica preguntó a las palabras-palabritas-palabriurá si tenían un cuatrimotorrrr, si tenían un apicultorrrr. La niña gótica preguntó al mendigo de la esquina qué diseñador te hizo, amigo amado, quién te pintó en esta esquina, déjame vampirizarte como Zara nos enseñó a hacer en los catecismos untosos y sagrados de nuestros cielos porno codificándose como tarifas de canal satélite sin pagar."
ResponderEliminarEste es el inicio de mi próxima novela. Aún debo depurarla un poco más: cuando esté finiquitada la quemaré, me tragaré sus cenizas e iré a cada casa de cada potencial lector que la hubiera comprado para vomitarle encima una porción de mi arte.
(Pues no soy yo diferente ni na)
Lo que yo pienso de Alpha Decay: por cada Michael Cera hay dos Fabián Casas, por cada Hinson hay una Pola Oloixarac, por cada POLA, imagínate, HAY UN PUTNAM o una Conquista de lo cool, o un libro sobre hipsters escrito por intelectuales de renombre.
ResponderEliminarEs la única editorial capaz de publicar libros muy arriesgados y de gente joven. O el de Denton Welch, celebrado por Aira, en fin.. Para mí, sintonías aparte, máximo respeto.
Que sí, que sí, venga Lunita y demás, ya podeis ir a cenar el kebab de turno.
ResponderEliminarMe comentan que Olmos está saliendo con la gótica acrílica. Luna le dijo que le amaba, en twitter. Pero era sólo para conseguir el libro gratis. Ella sí es monógama.
¿Pero qué os ha dado con Pola Oloixarac? Es rematadamente horrible... Literatura insustancial con ínfulas de vanguardia... Me quedo a cuadros siempre que alguien la menciona como un referente, la verdad.
ResponderEliminarBueno, Danilo, de acuerdo con todo. De hecho creo que ahora lo entiendo mejor. Estoy de acuerdo en que las palabras no se pueden vaciar de significado. Así que lo único que nos quedaría por discutir es si esta escritora hace con sentido (y gusto y esas cosas) los intercambios de significados a los que como máximo puede pretender. A no ser que lo que en realidad quiera cambiar de significado sea la palabra "palabra", que es un atajo rapidito porque si una palabra es, en realidad, una botella ocurre que lo puedes vaciar de significado al instante. Y da igual que el significado sea agua como que sea leche. Está chupao. Y entonces podría resultar que, dando un paso más allá, su próximo libro sea una perfomance en la que se vacían botellas de leche o de vino o de agua. Y esto sí que sería de verdad moderno. Menuda novela. Como para parir una generación.
ResponderEliminarUna gozada, Daniel e inmaculada.
Jajaja, pueden ir a cenar juntas al chino, la lunita y la acrílica, e intercambiarse pins.
ResponderEliminarLo mismo digo, Peri Lope. Un placer leerle a usted.
ResponderEliminarLo primero felicitar a Daniel, sus comentarios me parece que se ajustan como un anillo mágico al dedo índice de la estúpidez.
ResponderEliminarLo siguiente mi pedantesca aportación:" Las debilidades de los libros son, con frecuencia, la contrapartida de intenciones abstractas que no han sabido llevarse a efecto" . Deleuze
Y es que la chica o bien no sabe lo que dice o nos toma el pelo o por el contrario es verdaderamente genial y entonces tampoco estaríamos en condiciones de apreciar su obra en lo que vale (sólo el paso del tiempo nos permitiría a quienes no somos geniales como ella apreciar su obra en lo que tiene de fuego arrojado al porvenir).
@La sargento Margaret
ResponderEliminarO a lo mejor estaba sólo diciendo lo que cualquiera de nosotros querría decir: que ojalá pudieran hablarlo en persona, en ambiente distendido, con los matices del cara a cara, y no por internet, dado que entre ellos había buen rollo y no querría estropearlo...
La verdad es que es muy de cajón. Soy muy fan vuestro, Sargento, Tongoy, Anónimos, pero cuando queréis buscar tres pies al gato desconectando la capacidad intelectual, o cuando os da por alguien hasta que acabáis dándole la vuelta a vuestro propósito por extenuación, me dais mucha pereza, la verdad...
@Angeles
ResponderEliminarYo particularmente ni lo sé ni me importa, pero lo cierto es que ha quedado muy feo. Suena a reprimenda de la nena, como si el Pron hubiera roto el "pacto de sangre". No sé, es de muy tontitos ese rollo. Y es normal que nos partamos la caja aquí. Ya se sabe que somos el Cuore de la literatura... porque los demás no, son súper serios, claro. Salta a la vista.
@angeles
ResponderEliminarpara ese tipo de cosas, te recomiendo sálvame deluxe
las criticas literarias, independientes, se escriben y se publican
buen rollo con Olmos? querida, el chico decidió hace tiempo ir de provocador como estrategia de marketing -vende más. El problemita es que ese personaje se le ha solapado en la novelita, una extensión de los chascarrillos de malherido. Y el problemita número 2, para piano y violín, lo señala ferpectamente Pron: le falta inteligencia -abstracta, musical, sinfónica- y le sobra supuesto ingenio -juegos disonantes de palabras, adjetivos metidos con calzador.
Hala, que pase el siguiente prodigio de la lista Espanta de Matutano.
No, Peón no crea animadversión porque diga la verdad, sino porque intenta oficializar la crítica bloguera a lo Carlos Boyero. Esto es: yo leo, pero mis cojones leen más.
ResponderEliminarLa crítica carlosboyera es aquella que, despojándose de la mínima objetividad y cortesía necesaria (acabar la película o, en este caso, el libro), se deja influir en sus críticas por si la sala del cine está bien o mal iluminada, la gravedad de su reciente diarrea o lo reyezuelamente que le haya tratado la organización del festival de turno y, en especial, si le pican los bajos o si se aburre o si a su papá le han operado de cistitis. Luego lo vuelca o "vierte" (por la necesaria connotación de vertedero), abre la cerca, entran las vacas a mugir y todos tan contentos.
Conste que yo estoy de acuerdo con ciertas apreciaciones sobre la manera de hacer catálogo de Alpha Decay, pero no me la cojo con la tapa del baúl -carlosboyeramente- ni dejo que en mi crítica se transparente que me cae mal la autora, que me revienta el modo de hacer marketing de su editorial y, en consecuencia, la voy a poner, a la señorita di Grado, por donde los cerdos se revuelcan.
Yo me divierto mucho con este blog. Incluso si Carlos leyera y despedazara (o le gustara, que también)alguno de mis libros, me lo seguiría pasando requetebién con todos estos berenjenales que se montan y estos personajes que él deja entrar a decir mimimi, yoyoyo, corrupciónnononono.
Pero a ver si os dejáis de hostias los anónimos, que no es lo mismo que os gusten los espejismos ("nosotros no insultamos a nadie, sólo decimos la verdad... ¡la verdad! ¡la pureza y la crítica independiente! Eso defendemos) que el hecho de que seáis bastante idiotas. Me parecería mucho mejor que, aún anónimamente, diérais buena cuenta de los manejos editoriales que comentáis, con detalles, datos que sean sospechosamente verosímiles y, en fin, esas cosas de Scotland yard de provincias, que se cuecen igual que las habas de cualquier otro ámbito mercantil y artístico. Pero no podéis. No podéis porque, efectivamente, luego hacéis cola a la puerta de las editoriales a ver si al editor o editora le da por rascaros el hombro y ofreceros unas pastitas.
Al menos Carlos no se esconde. Ha encontrado su tronera, y nos ha animado mucho. Pero la crítica carlosboyera es lo que es. No tiene más historia. No es "razonada", "inteligente". Es cojonera, de "mis cojones lo dicen".
A mí todo esto me parece fantastiche. La crítica de blogs no tenía un carlosboyero de pitiminí entre sus filas. Hace buena falta un poco de sangre y fuego, que los suplementos están muy aburridos.
De acuerdo en mucha parte de lo que dices, señor/a crítico/a, menos en que no había crítica carlosboyerista hasta ahora. Me temo que únicamente la hay de esa. Las pruebas las tienes delante de tus ojos cuando entras en cualquier blog o te lees cualquier reseña. Dime alguna crítica argumentada con conocimiento de causa y no en base al thumbs up ya clásico e igualmente "neroniano" , aprovechando la cultura clásica que ha mostrado Bolmangani aquí.
ResponderEliminarY si las críticas 'oficiales' están aburridas es porque solo dejan entrar a los que les conviene. Que abran las puertas a los leones, a ver qué pasa.
Y no basta con autoproclamarse 'crítico'. Hay que demostrar con hechos, es decir, con críticas de calidad, bien elaboradas, estructuradas, argumentadas y documentadas, que se es. Si no, lo único que tenemos son 'críticas' y 'críticas en contra', con la diferencia que al Sr. González no le pagan por hacerlas y a muchos otros sí, lo cual todavía tiene más delito.
ResponderEliminar'críticas a favor y en contra' decía.
ResponderEliminarSaludos
Olmos
ResponderEliminarya dejaste claro en twitter que
-no te gusta Carlos Boyero
-te gusta Almodóvar
-no te gusta Vázquez Montalbán, y alardeas de ello
-mueres por Houllebecq
-...etc
A muchos, nos gusta Carlos Boyero. No es perfecto, pero tiene criterio y se moja.
Muchos, no soportamos a Almodóvar: retórico, cursi, cargante, copiador de todo lo copiable, y lo peor de todo, banal. Te suena?
Eso si, él se considera un genio.
Será la célebre conjura de necios.
El genio se siente rodeado de necios.
Ay, y si los necios no celebran al genio? Trágico.
Anónimo Veneciano.
Ay, querido anónimo de las 14:28, pero es que yo no he dicho que sea crítico. Soy autor, con libros. Menos que Olmos, ergo, no soy él.
ResponderEliminarAnónimo veneciano: tómate algo en la barra y tranquilízate. Luego vienes y nos lo cuentas.
Perdón, me había parecido, por su defensa de la crítica oficial. Disculpas.
ResponderEliminarSi solo es un simple escritor no tendrá nada que temer de críticas como las de Tongoy. Si le gusta, lo dirá, y si no, también. Y nosotros diremos lo que nos parezca, en base a nada, a algo, a si lo hemos leído, a si nos cae gordo o de puta madre... que como son apreciaciones personales según la imagen que ustedes nos muestran y como no hay nada personal, ya que no los conocemos de nada, pues si quieren se aplican la copla o pasan olímpicamente. Nada más. Todos tranquilos, pues.
Señor Peón, usted no presta atención a los jóvenes, usted apalea a los jóvenes, que es más fácil que apalear a Marías.
ResponderEliminarNo imagina el daño que puede causar una crítica tan destructiva como las que acostumbra a hacer usted a un autor que empieza.
¿Y todo este montaje para qué? ¿Para tener más visitas en un blog que importa únicamente a una pequeña parte de la serie b de la literatura española?
Nos estamos volviendo locos, con esto de internet.
Un veterano.
Empiezan muchos, veterano, demasiados, y la mayoría de veces no queda claro por qué.
ResponderEliminarAlgunos invertimos nuestros ahorros y parte de nuestra vida en la literatura para que otros como usted, que ni siquiera compra libros, destrocen nuestro trabajo desde su anonimato, y con su gratuidad. Gracias, Peón.
ResponderEliminar@16:24
ResponderEliminarY la criba la hace el prestigioso doctor Tongoy, ¿no?
Eso de que no compro libros se lo acaba de sacar de la manga. No solo compro sino que también regalo. Lo único que exijo, y estoy en mi derecho como su fuente de ingresos, es que no me estafen.
ResponderEliminarDe nada.
@16:28
ResponderEliminar¿La hace alguien?
@ 16:31
ResponderEliminarSi vendes más de dos mil ejemplares la criba la hacen los lectores. Si vendes menos de quinientos, como el mal-herido y la mayoría de escritores frustrados que comentan aquí, la criba no es necesaria. Ellos mismos se aniquilan en los blogs.
¿Y las críticas de Peón de verdad les parecen tan destructivas? ¿No lo es mucho más la de Pron a la novela de Olmos, que no solo se carga el libro sino a todos los comentaristas y reseñistas diversos que lo habían puesto por las nubes? ¿O el mismo malherido cuando iba d'enfant terrible y se cargaba sin compasión a quien le apetecía solo porque le caía mal? Venga, no seamos tan hipócritas.
ResponderEliminarAl inversor de su vida y ahorros en la literatura: jódete. Oye, yo me lo gasto en hacer reproducciones de veleros del siglo XVIII con papel de arroz encolado con moco de caracol y luego no vengo a quejarme y echarte la culpa de que se me hunden todos.
ResponderEliminarLa crítica de Pron a Olmos sí que merece un post aparte. No es justo que esos dos titanes ajusten cuentas en la intimidad sin que los opinólogos tengamos derecho a comentar la circunstancia y origen de la pugna, que es tan aviesa y fratricida que está todo el mundillo con la boca hecha agua de las revelaciones que van saliendo. Cotilleo real ya!
ResponderEliminarAdemás, añadir como ha quedado constancia aquí por usuarios; a veces una mala crítica de Peón lleva a que alguien se compre, lea, etc. el libro porque no coincide con su gusto literario.
ResponderEliminarYo me he leído el libro de Olmos, y lamentándolo mucho, creo que Pron tiene el peso de la razón de su parte, al menos en un 90%. A lo mejor se podía haber ahorrado algún calificativo (o no), pero tampoco considero la crítica excesivamente dura.
ResponderEliminarOtra cosa es que estemos acostumbrados a lisonjas y fellatios varias, en comparación sí que parece una puñalada.
Y conste que me gusta cómo escribe Olmos, pero ésta última, sin ser una mala novela, creo que ha sido fallida.
Es que se está muy poco acostumbrado a leer críticas negativas, y luego pasa lo que pasa, que todo se interpreta como un ataque o vete tú a saber qué. Pero cargarle las culpas a Peón no es la solución en absoluto. Mejor ir quitándose las vigas del ojo.
ResponderEliminarTotalmente de acuerdo.
ResponderEliminarEl debate no es si la critica de Pron es justa o injusta. Se trata de si es acertada o no.
Y sí, lo es. Está argumentada y aporta ejemplos.
Además habla de un "abismo insalvable".
El que media entre el notable afán de notoriedad y ego del tal Olmo, y los resultados demostrados.
El camino deberia ser justo al revés.
Estar calladito, y que la obra hable.
La obra ha hablado, es una caquita.
El autor no para de hablar en los medios: curiosamente, no habla de su obrita. Nada que decir.
Se dedica a despotricar de esto y de lo otro.
En plan de Houllebecq: yo me cago en todo y en todos y ellos que se dediquen a comprar mi libro.
Olmo, a seguir pagando alquiler en Usera.
Las Vegas seguirá siendo un sueño para ti.
Pero, amigos, respecto a la lolita gótica, ¿qué es lo que os jode?
ResponderEliminar1. Que la niña escriba mierda y se crea la pera en bote?
2. Que la publique la inefable Ana S?
3. Que trate de colárnosla el arribista Ibrahim, como ya hizo con el Tao Lin?
Pues ojo:
1. Eso os ha pasado a todos vosotros, que os creíais Cervantes con vuestras memeces de los 15 años. Es lo más normal y si encima vienen y te ofrecen publicar ¿qué vas a hacer, decir que no? Por favor.
2. Que es una editorial, no una fundación de apoyo a la literatura. It's the economy, stupid.
3. Este vende a su nonato hijo por un poco de gloria. Estamos ante el caso de tipejo mediocre con el ego más pantagruélico de la república bananera de la Lite.
¿De qué os ofendéis?
Nosotros de nada. Los que se ofenden son los que no entienden por qué no tragamos.
ResponderEliminarAbdullah,
ResponderEliminarya tienes internésss en el cuarto compartido en el piso compartido en el Raval? Nos alegramos.
Sí, muchas editoriales son Ongs, por ejemplo cuando te publican a ti, a Olmos y a lunita a fondo perdido. Les sale más caro no publicar, que publicar. Tipo Timadori. Necesitan tener las máquinas engrasadas.
Respecto a la lolita gótica, es puro divertimento, Abdullah. Eso tu no entenderias. No hay finalidad, ni arribismo. Just for the sake of it.
Afilando los cuchillos de teletienda, pa cuando te saquen el homenaje a Foster Wallace -apropiacionismo?- en Timadori. Decias que el año literario habia terminado? Celébralo. Acaba de empezar.
O, como diría esa fina estilista del lenguaje, "es la puta polla".
el de las 16:37 es el anónimo más acertado que he leído en semanas. Eso, que se queden Olmos y Pron durmiendo en el garaje, que en la casa no cabemos todos.
ResponderEliminarHola de nuevo. A Peri Lope e Inmaculada Concepción quería darles las gracias por el estimulante intercambio de ideas e impresiones acerca del lenguaje y su relación con la literatura. Quizás, sólo quizás, si se hablara algo más de estos aspectos se podría respirar un poco de aire limpio entre tanto "yo digo", "tú dices", "mis cojones mandan", "vivan los nocilleros y con sus libros me hago pajas", y tanto voluntarismo que "fundamenta" ciertas afirmaciones. Se puede comprobar también que la labor de Carlos comienza a calar en el mundillo, y, consecuentemente, a ofender egos demasiado habituados a tomar por talento real lo que no es más que mera promoción y mercadotecnia. Carlos no se presenta como un académico, jamás lo ha pretendido, y ni siquiera como "crítico sesudo"; Carlos es un lector inteligente y con un gusto formado, al que le gusta la literatura tanto como el jamón, y que aspira a transmitir sus impresiones. Si éstas coincidieran con el criterio dominante (el cual no proviene, por cierto, de los mismos lectores o de las esferas académicas de la literatura, sino más bien de otros lugares), aquí no habría problema. "De puta madre, Tongoy", le dirían. "Cómo controlas de letras, tío", proclamarían a los cuatro vientos. Sin embargo, resulta que una minoría de tipos y tipas que, además, parecen poseer cultura y criterio, están empeñados en pronunciarse contra la opinión dominante de marras, y esto les acarrea lo de siempre. Sólo hay que echar un vistazo a los últimos comentarios, en varios de los cuales se acusa a Carlos de hundir a jóvenes autores, o algo así, además de presentarlo culpable de carlosboyerismo o cosas similares... En fin, más de lo mismo, lo de siempre: cuando estoy en la cresta de la ola con promociones y adoradores pelota soy más chulo que el barretas (expresión de mi tierra); cuando aparece alguien que contradice la opinión "general", estallo en ira y exijo que todos reconozcan unánimes su falta de criterio y su estupidez; si no lo consigo, paso al insulto y quizás me enmascare para no arriesgarme demasiado; si la cosa no acaba de cuajar, adopto el papel de víctima, frente al malvado que se niega a reconocer mi talento y pretende hundir la "gran" literatura entre risas de puro sadismo. Todo ello, además, lo hago sin enterarme de que poco cuento yo en realidad, que aquí las que cortan el bacalao y deciden quién vale y está presente son las editoriales, con criterios, cómo no, muy literarios, y que yo soy, realmente, a la literatura lo que Dani Martín y el puto Canto del Loco a la música.
ResponderEliminarDe verdad, las cosas pueden hacerse de otra manera, y no insultando ramplonamente. Fíjense en Jose Luis, que no comparte el criterio de Carlos y lo comenta tan tranquilo con inteligencia, respeto, y algo de ironía; todos leemos sus comentarios, entramos en discusión (interesante) con él, y aquí paz y después gloria. Y salen ganando, por un lado, nuestras cabezas, mejor amuebladas tras este tipo de intercambios, y, por otro, la literatura, pues más gente se lanza a leer lo comentado y a discutirlo. Gracias también al anónimo de las 4:00; por cierto, la cita de Deleuze no la conocía pero sintetiza, creo, la esencia de la literatura fallida.
Joder, Nehmovich, hasta en los comentarios se reproduce la biología escolar. ¡El pelota de la clase! Ahora resulta que los anónimos son "gente formada", con "criterio", que no compra el "discurso oficial". Acabáramos. ¡Sigue iluminándonos, por favor, a ver si no nos estrellamos contra el quitamiedos!
ResponderEliminarRecopilo algunos momentos epifánicos, a ver si así te quitas las legañas, que se te ha puesto cara de curilla con tanto loquedigacarlos.
"Sí, muchas editoriales son Ongs, por ejemplo cuando te publican a ti, a Olmos y a lunita a fondo perdido"
"Olmo, a seguir pagando alquiler en Usera.
Las Vegas seguirá siendo un sueño para ti".
"Y el problemita número 2, para piano y violín, lo señala ferpectamente Pron: le falta inteligencia -abstracta, musical, sinfónica- y le sobra supuesto ingenio -juegos disonantes de palabras, adjetivos metidos con calzador".
"Jajaja, pueden ir a cenar juntas al chino, la lunita y la acrílica, e intercambiarse pins. "
"Yo también decía muchas estupideces supinas con 23 años con ánimo de parecer un poco afectada".
Nivelón intelectual, ¿eh? Y sólo acabo de empezar a mirar.
No sólo eres un pelota, Nehmovich, sino que nos estás inclinando a pensar otras cosas mucho peores.
A Carlos no se le acusa de nada especialmente grave. Decir que sus críticas son de un carlosboyerista convencido a la pequeña, mundana y pobre esfera de los blogs es resaltar una obviedad. Al fin y al cabo, puedes leer la crítica otra vez y verás, como hemos señalado varios, que "decir la verdad" no es especialmente cierto en este caso. Es un "mis cojones", un "Esta tía me parece una petarda", un "Estoy harto de Alpha decay", y un poco menos de "Vale, el libro es un mojón por esto, esto y esto".
Ya hemos bajado el pulgar neroniano contigo, no sigas intentándolo que eres muy aburrido y, más que comentarios, escribes primeros capítulos de novela. La gente no tiene tiempo, Nehmovich, ¡vivimos en un tiempo acelerado!
No sea tan duro con nosotros, pobres anónimos incultos y desinformados, que también tenemos derecho a echarnos unas risas de vez en cuando, ¿no?. Y siga leyendo, que hay más comentarios, algunos hasta interesantes.
ResponderEliminarQuerido, admirado, adorado y siempre magnífico anónimo de las 19:10; he de decirle que, al parecer, ha bebido demasiado hoy. Mi comentario cargaba contra aquellos que, disfrazados de anónimos cuando en realidad son escritores interesados en insultar al que los critica, muestran una evidente mala educación. No disertaba sonbre el resto de anónimos, sobre los que no me parece posible establecer una definición general, dado lo variado de sus posturas y opiniones. El caso, según me parece, es que está mal visto (o está mal visto por usted) hablar bien de alguien, y ahora parece ser censurable declarar en alta voz tus simpatías y acuerdos con cierta sinceridad y sin intereses pragmáticos. Parece mejor visto, sin embargo, hablar en nombre de todos, formulando juicios pseudonormativos como "Ya hemos bajado el pulgar neroniano contigo". Dios mío, la Asociación de Comentadores Oficiales de los Blogs en Castellano me ha expulsado de su seno, empleando a un tipo sin nombre, como un día expulsaron a Spinoza de la sinagoga. ¿Qué haré ahora con mi triste vida? En ningún momento, además, he elogiado los insultos de otros cuya postura comparto, pero no su actitud beligerante. Y sí, la incontinencia verbal siempre ha sido mi problema. Sin embargo usted, querido anónimo de las 19:10, ha resuelto con brevedad y síntesis mi descalificación, en una respuesta sucinta, pero que muy sucinta, basada, además en un argumento "ad hominem" que carece de todo valor. En fin, si entro en este blog y de cuando en cuando comento, se debe a que, ¡Sorpresa!, el criterio de Carlos me parece muy fiable, estoy de acuerdo con la mayoría de sus críticas y me parece bien decir algo cuando ciertos energúmenos lo atacan sin venir a cuento. Es por eso que no entro en el blog de Ibrahim o el de Villena o el de Bellver, porque no estimo necesario iniciar polémicas personales contra ellos ni llenar su página de mierda que rezume envidia. Si eso le molesta, allá usted... Me ha encantado, sin embargo, el último conato de argumento: "la gente no tiene tiempo", "vivimos en un tiempo acelerado"; claro, eso justifica y legitima escribir rápido y mal, y pensar todavía peor. Apoyemos todos juntos la decadencia del pensamiento y la escritura, ¿No ven que hay que darse prisa? Brillante... Por cierto, lo de calificar mis intervenciones como "primeros capítulos de novela" me parece exagerado, no por la extensión, sino por la calidad. Lo que algunos entienden por novela, madre mía... En todo caso, aquí tiene otro. Que lo disfrute.
ResponderEliminarNehmovich, a pesar de tus largas parrafadas, estamos contigo. Eres pesado, pero honesto.
ResponderEliminarEl anónimo anterior que va de justiciero, además de tonto -el pobrecito se piensa que aqui se entra a comentar para "elevar el nivel intelectual", no amigo: eso queda para el tentaciones, y quimera, esto es puro fuego de artificio- es aburrido. Hay una cosa peor que los comentaristas de blog. Los que entran a
1.- recopilar comentarios
2.- emitir juicios de valor sobre comentarios
3.- prescribir como deben ser los comentarios y de paso, la humanidad, asi en general
Amigos del gnomo, amantes del orden, anonimos moralizantes. Ya teneis vuestro propio blog, con comentarios moderados, tirando a muy escasos. No es eso prueba suficiente de vuestra gran trascendencia intelectual y superioridad moral...? Umm.
Rosita la cantaora.
Me dedico al flamenco. En un rato libre he leido lo del Olmos ese. Y sí, me parece a mi que va a seguir en Usera, pillando wifi gratis del patio de vecinas. Con su Iphone.
Anónima,
ResponderEliminarte has ganao el titulo a cursi y redicha de la tarde. Como ya te has identificado bastante como del grupito de mediaLuna y Abdullah, no hace falta decir más. Los méritos demostrados son:
- pulgar neroniano
- momento epifánicos (jo, que culta eres, Olmedo...me dejas estufepacta compacta, mari..)
- tu repetitivo odion a boyero
el premio consiste en una columna gratis en el proximo Quimera
¿Pero en serio os leéis los comentarios de Nehmovich? Atónito.
ResponderEliminarLos comentarios de Nehmovich merecen ser publicados en Alpha Decay. Quedaría muy molona una recopilación en la colección mini (o nini o enchufadillos).
ResponderEliminarDesde acá se solicita pronta reseña de Contra la postmodernidad, de Ernesto Castro. No es necesario sea tan larga como la de Quimera.Gracias de antemano.
ResponderEliminarSe ruega no afilar cuchillos con casigóticas en Leeds. Disimulen, disimulen. Ya publicarán, tranquilos.
ResponderEliminar¿Publicar? jajaja, como si eso fuera la meta de los que comentamos aquí. Eso queda para los que no tienen trabajo.
ResponderEliminarPublicar es de cobardes (próxima recopilación de cuentos en LdS)
ResponderEliminarDiríase que los hay que enseguida ven un escritor en el espejo y, para demostrarlo, corren al ordenador y lo intentan demostrar dándole un nuevo uso al lenguaje. Y no va de eso. Va de generar interés con lo que se cuenta. El cómo se cuenta va después, muy lejos. Es como un tía muy buena con los tobillos anchos. Mejor estrechitos, sí. Pero casi que nos la follaríamos igualmente. Lo que viene a decir Peón es que le han hablado de una chati del copón con lindos tobillos y preciosa clavícula y compacta vagina juvenil, y que ha queda o con ella a ver qué tal y otra vez era una gorda con dientes de conejo. Luego ha llegado a casa y nos ha avisado que a él no le gustan las gordas con dientes de conejo, que ojo con lo que recomienda el "chulo" en
ResponderEliminarcuestión, y que ya vale de tobillitos y claviculitas y vaginitas rasuradas, que a él lo que le gustan son las tías buenas de toda la vida aunque no se dejen meter el dedito en el culo al llegar al clímax.
@anónimo 21:50
ResponderEliminarPublicarán aquellos por quienes afilan los cuchillos realmente.
@22:21
ResponderEliminarUf, eso suena a amenaza. La cuestión no es publicar sino vender, amigo anónimo.
Las palabras al servicio de la (auto)promoción.
ResponderEliminar¿Si Pron se ha cargado a Olmo, hará la vista gorda con Ibrahimovic?
ResponderEliminarMe hace mucha gracia lo de llamarse por la hora
ResponderEliminarAnónimo de las 20:47
ResponderEliminar¿Anónima? ¿Olmedo? ¿Son tus primas de Cuenca?
¡A mí que me registren, que tengo pelos en las piernas!
La verdad, ya he publicado en Quimera alguna vez, pero como me va más lo de que me paguen por escribir (es que, ¿sabes?, el alquiler de mi casa hay que abonarlo religiosamente una vez al mes), restrinjo mis actividades todo lo posible.
Seguid intentándolo, seguro que acertáis con algún dato alguna vez y me sacáis los colores.
Ay, pillín, pillín, que me quería engañar... ¿ve como sí tenía algo de crítico?
ResponderEliminarCompletamente de acuerdo con usted, aunque Danilo T. Brown tiene algo de razón. Tal vez habría que afinar un poco: a partir de 2012, los menores de treinta años (empezando a contar desde treinta años atrás) deberían tener prohibido escribir novelas.
ResponderEliminarPero yendo al meollo de esta entrada (salvando su atinada opinión y obviando a la Viola esta), me quedo de piedra con lo de Pron. Aquí hay cosas que se me escapan, es lo malo de escribir al perezoso ritmo que pide el cuerpo desde una hamaca alejada de la vorágine. La reseña de Pron destila algo más que crítica literaria. ¿Qué dirá Olmos de esto?
Pero sigo leyendo comentarios y ¿también entran en el lote LM e IB? Anda que no estoy perdido ni nada.
Me adhiero a la propuesta de beatificación del anónimo de las 16:37
Buenos días,
ResponderEliminarTienen razón; me han convencido: esto no hay por donde cogerlo: lo dejo. Tongoy cierra esta misma tarde.
Es broma.
Lo primero es pedirles disculpas por no haber podido participar en el debate de ayer pero donde estaba no había cobertura (sí, todavía quedan espacios así, no está todo perdido) y hasta ya muy entrada la noche no me enteré de la movida.
Al grano.
El anónim@ de las 16:17 ha dado sin saberlo con la clave del problema que aquí nos ocupa y que a estas alturas de la película poco o nada tiene que ver con la novela de la niña Viola. Se pregunta este anónimo a qué viene este montaje en este blog que tanto daño causa en quienes empiezan a escribir si al final esto sólo da visitas y no dinero que es lo que mueve el mundo y que entiendo que entonces sí me justificaría. Para mearse, sí, pero en el fondo tiene razón: no hay dios que lo entienda: efectivamente este sitio no da ni para una manzanilla del mercadona, más bien al contrario, pero es que este sitio, a ver si nos enteramos de una puta vez, no es un blog de crítica literaria si no un espacio personal sin ánimo de lucro en el que yo vierto mis opiniones about la literatura, mayormente. Lo sorprendente no es lo hijo de puta que pueda yo llegar a ser sino la importancia que dan algunos a los comentarios aquí vertidos y que honestamente no creo merecer. Relájense. No pasa nada. El mundo sigue girando y este no es el primer blog que vierte sus opiniones con cierta crudeza. ¿Les jode que por mi culpa se dejen de vender libros? Pues entérense de algo que debería dolerles mucho más: en mis conversaciones privadas con amigos y conocidos, vía mail o cara a cara, trato de que se vendan muchos menos de los que finalmente reseño aquí y les aliento a que lo transmitan al resto de sus amigos por todas las vías posibles creando una cadena lo más extensa posible. Puesto que cada vez conozco más gente es de suponer que de aquí a seis años me habré cargado no menos de dos ferias literarias y tres o cuatro mesas redondas.
Conclusión: en general creo que ha quedado bastante claro que en este blog no se hace crítica literaria, ni se fomenta la venta de libros (1), ni nada que tenga remotamente que ver con la literatura de altura. Espero que aclarado este punto todos aquellos que han manifestado su desprecio por este blog inviertan efectivamente su tiempo en tareas mucho más nobles. No sean de esos que dicen ver documentales cuando en realidad están leyendo el hola o viendo a Jorge Javier Vázquez rajando de todos. Lamentaré verme privado de su compañía pero sepan que lo entiendo. No se sientan mal por no volver.
Este mismo fin de semana en un debate de Facebook me pusieron también de vuelta y media por la (voy a hacer una interpretación un poco de aquella manera) decepción que supuso no ser esto lo que parecía hace meses: lo del espacio literario que comentaba antes y tal. En fin. En general tampoco gustó que hablase de un libro sin haberlo leído (acabado) y por lo que ya suponen: este puto circo tan repugnante (y adictivo, para ellos también) que tiene a los anónimos de protagonistas. Qué le vamos a hacer: ya hay que ser obtuso también para ver nada más que lo malo. El caso es que mientras se preguntaban cómo se podía ser tan cabrón de leer nada más que 70 páginas e igualmente reseñar pensaba yo en todos los artículos que leí estos días sobre Viola y que parecían escritos por gente que ni 70 ni 20 ni 1. Pero tengo un plan genial. Denme una semanita y si sale todo como quiero verán que bien lo vamos a pasar.
Nuevamente agradecerles a muchos la defensa de este blog que nada más quiere ser el antro de perdición de la libertad de expresión y no le están dejando con tanto hablar de la alta literatura. Gracias también a los detractores por participar del debate. Mi más sincero agradecimiento a todos. Son ustedes fantásticos.
(1) Esto lo digo por aquel que me acusaba de no gastarme los cuartos en las cosas de leer. Anónimo del 23/10 a las 16:26 sepa que me he gastado más pasta que muchos aunque puede que no en lo que usted quisiera. Por sacarle de dudas y si puedo también los colores también: en lo que va de año (de memoria): Dostoievski (varios), Ballester, Bertrand Russell (varios), Jeanne Hersch, Vila-Matas, Cortázar (varios), Bernhard, Matthiessen, Salinger (varios), Celine, Faulker, Gide, Delillo, Lipovetsky (varios), Ellroy, Flaubert, Joyce y más. Joder, pues no me gasto yo pasta ni nada para que me vengan ahora a llamar “rata”.
ResponderEliminarTiene usted mucha razón, señor Tongoy, en lo que comenta de los artículos de prensa sobre Viola: no leyeron ni una línea. Además, no está de más recordar que esto es un blog, no el Ministerio de cultura ni un suplemento cultural, y usted puede hacer básicamente lo que le venga en gana (salvo insultar, claro, que no lo hace).
ResponderEliminarY ya que estamos resaltaría otro aspecto de este espacio: su apertura. Aquí se reseñan novelas de todas las editoriales, desde Jekyll & Jill hasta Planeta (por cierto, me gustaría que se reseñaran más libros de... Alfaguara). Pocos blogueros (ni se diga críticos) pueden afirmar esto de ellos mismos (con lo que condenan al silencio a muchas editoriales). Ah, y aquí se reseñan libros de todas las editoriales, y a todos, si lo merecen en su opinión, se les pone a parir por igual. En cambio Amores=Alpha Decay, Morato=Periférica, Bellver=Libros del Silencio, Antonio J. Rodríguez=Alpha Decay & Mondadori, etc. ¿qué tienen que decir sobre el asunto? A esta gente le molestan los anónimos pasionales pero no tienen nada que decir sobre su corporativismo y colegueo.
Perdón por rebajar de nuevo la reflexión al cenagoso terreno de las niñas bonitas atribuladas, pero es que casi me dá un ictus con la nueva entrada de nuestra Viola-di-Grado-Ibérica.
ResponderEliminarMucha rabia entre líneas. Ni puto caso.
ResponderEliminarY qué fea es Ana S.
ResponderEliminarMe pierdo: ¿qué rabia? ¿qué niña ibérica es la viola? y ¿qué nueva entrada es esa del "ictus"?
ResponderEliminarAna S., Luna, Viola: lo postmoderno es feo y kitch, como sus representantes femeninas.
ResponderEliminarLa VdG ibérica es Luna. La entrada es la de las fotos postcoitales.
ResponderEliminarVale, me lo parecía. Nada que decir al respecto.
ResponderEliminarY Olmos se las come a todas. Qué manera de defenderlo las mujeres. ¿Estará tan bueno?
ResponderEliminarhttp://www.elboomeran.com/blog-post/#form_comentario
Brutal el nivelón de los comentaristas, escritores consagrados incluidos, no? Para que luego hablen de nuestra incultura y mala leche...
ResponderEliminarPeón, reseña algo del grasiento, aunque no tenga obra conocida, que da más juego que nadie y hasta responde los anónimos. Estas feas de Alpha Decay son aburridas hasta para los anónimos.
ResponderEliminarQue hay una diferencia fundamental entre lo que hacías al principio y ejerces ahora nadie lo duda. Pero eso es lo de menos. Por las razones que sean uno va probando y pulsando hasta encontrarse cómodo con unas temática, ambiente, tono y audiencia. Creo que, en general, a quien pasea por aquí le interesa la literatura, otra cosa es que sus simpatías, por así decirlo, no se inclinen por los libros/personas/personajes que sueles comentar últimamente. La culpa no es tuya ni de ellos ni de las editoriales, mucho menos de los escritores. La causa hay que buscarla en la diversidad de opiniones y en la imperfección humana a la hora de expresarlas (esto es lo que realmente engancha, un Flaubert resucitado hubiera vuelto a morir de risa al ver a sus Bouvard y Pécuchet convertidos en iconos de la estupidez humana). También en el hartazgo o afinidad que sienten algunos sobre determinados aspectos publicitarios tales como la pose, los agrupamientos, la modernidad o la contramodernidad. Punto. Aquí no hay más tema.
ResponderEliminarYo nunca leo crítica literaria a no ser que adquiera el rango de literatura y entonces la compro en formato libro; también algunos blogs que la ejercen de verdad y de manera altruista; el resto no me interesa porque suele ser (suele ser) fatua, pedante tanto en el contenido como en la forma, rentada, cateta y brutalmente aburrida (y no me aburro con facilidad…). También leo este blog con una regularidad cercana al 100%, y soy seguidor suyo desde el día de su apertura, sólo nueve semanas (sin media) después de la del mío. Y lo leo porque, aunque digas que no es de crítica literaria, sí había en él una impagable carga emocional LITERARIA al respecto de las cosas que ibas descubriendo en tus lecturas. Emoción que no atrae ni interesa a la mayoría, pero sí a unos pocos, perdón por la reducción. Interesa la carnaza, eso que llaman verdad desnuda u opinión desinteresada pero que es más alimento y vitaminas para redoblar los jajajaja y los “ahora verás”, “te vas a enterar”, “de esta no te libras”, etc. Dijiste que Olmos dijo algo sobre tu blog que te hace una justicia tan flaca como un insulto, algo así como “Sólo un lector que dice lo que le ha parecido un libro”. Es decir, no ha leído tu blog (me refiero al de Carlos, no al de “Peón”). Ni puta idea, de verdad. Pero ya dije antes lo de la temática, tono, etc.
Por cierto, gran lista de compras. Sé que sabes que sé que sabes elegir qué comprar y qué pedir prestado (no generalizo porque no conozco a los demás y mucho menos sé el grado de conocimiento que tienen de tus dotes inversoras). Lo que no acabo de entender es por qué esa selección “de bolsillo” (permíteme otro chiste malo) se traduce escasamente en tu discurso público. Por qué la parte pública es deliberadamente naif, cuando la interior que ahora revelas es claro fruto de cuidado y reflexión. Y no me refiero al dinero sino al tiempo y energías dedicadas a poner en circulación lo que de entrada sabes que no va a gustarte o no vas a comprender y por eso ni te planteas comprarlo. De todas formas da lo mismo, al menos en el caso del título que encabeza estos comentarios me pudo la curiosidad tanto como para comprar el libro y leerlo entero (me faltan 19 páginas para acabarlo) y darme cuenta de que era imposible que a ti te gustase lo que había dentro, cuestión aparte de que quizá ya fueras algo condicionado por lo que había fuera y alrededor del libro, que ya has declarado que no te gusta. Pero esa es otra cuestión.
Saludos,
José Luis, si me lo permites, una pregunta: ¿a ti te ha gustado el libro? y sin benevolismos ni indulgencias debidas a la edad, el debut, blablabla...de ninguna clase. Me interesa tu opinión argumentada, a ser posible, tanto si sí como si no.
ResponderEliminarSaludos
Denle tiempo a JL, seguro que hace entrada para el blog. Por cierto, a ver si ahora el librito de marras va a ser éxito de ventas por mí culpa. Quiero comisión!!
ResponderEliminarJl, respecto a lo que dices... Lo hemos hablado mucho. Adoro la literatura y mis compras son seleccionadas hasta la extenuación. Soy un enfermo en ese sentido quizá porque trato de gastar lo menos posible obteniendo el máximo beneficio. El porqué hago lo que hago o trato los asuntos que trato en este blog… bueno, ya sabes que no me gusta hablar de estas cosas en público pero haré una excepción como agradecimiento por el tiempo que le estás dedicando esta vez. Antes de nada quiero decir que al margen de los temas tratados (y las maneras) detrás hay un ejercicio de honestidad y que jamás, jamás, jamás he dicho algo que no sintiese o creyese. Pero sí que hay otra razón y creo que es hora de decirlo aunque hubiese preferido hacerlo más visible.
Vayamos con un ejemplo. Cuando hace más o menos un mes leí “Memorias del subsuelo” quedé encantado y empecé a hacerle una entrada que llegado un momento tuve que partir en tres porque se me fue de las manos (luego la borré casi toda). Reflexionando sobre él y para profundizar más en el asunto hablé con cierta oveja por nosotros conocida. Antes de eso leí un ensayo de Wallace que fue el que me llevó al libro y después también algo de la biografía de Dosto escrita por Joseph Frank. Luego me compré el libro (el anterior me lo habían prestado) de cátedra para leerme el prólogo y una cosa llevó a la otra y ahora tengo sobre la mesa la opinión que Nabokov tiene de la literatura rusa y más concretamente de esta novela. Esto me está llevando mucho tiempo pero me hace inmensamente feliz porque aprendo mucho y descubro más. Generalmente con los libros que más disfruto me ocurre mucho que me tiro dos meses para saber cómo hablar de ellos y al final opto por no hacerlo.
De los otros libros, el de Viola, Olmos o el largo etcétera por todos conocido no espero ni me invitan a lo mismo que estos otros. Es lo que para mí distingue la buena de la mala literatura y mi ánimo al reseñar estas "otras cosas" obedece a dos razones: por un lado lo fácil que resulta escribir sobre ellos en poco más de una hora y por otro lo divertido que resulta ver cuánta gente piensa igual aunque lo digan de otro modo.
Claro que podría pasar de ellos y dedicarme a lo que creo que vale la pena pero por otro lado siento mucha curiosidad y me gusta por una vez ir con las novedades. También creo que de hacerlo así en cierto modo protege (por comparación) la buena literatura que no reseño porque, ya me conoces, soy un vago redomado y muy poco disciplinado.
Por otro lado: sé que este blog está condenado a desparecer en un plazo relativamente breve, ya sea en las formas actuales o completamente porque la paciencia de uno no es infinita. Ayer volví a intentarlo con el libro de Viola y llegué a la página 108 por no sé si esto tiene mucho sentido.
Otros proyectos vendrán que bueno me harán. Pero soy joven. Somos jóvenes. Tenemos tiempo y a mí este año me apetece perderlo así, aprendiendo lo malo, destacándolo. Y por el camino, pasar un buen rato.
Un abrazo, JL. (Y deja de tirarme de la lengua de una vez.)
Y si me lo permites, me gustaría hacer un pequeño comentario a tu reflexión, impecable por otra parte, José Luis.
ResponderEliminarSe ha hablado largo y tendido de Houellebecq, por ejemplo. El "personaje público" es deleznable. No hace falta más que buscar alguna entrevista por youtube para hacerse una idea. Como persona es odiado en el ámbito público francés, por su afán de notoriedad. Pero su obra...ah, su obra. Su obra es otra cosa. Puede levantar controversias sobre si es tan bueno o no, pero lo que es innegable es que merecen una lectura, aunque solo sea para opinar con conocimiento de causa porque origina debates de calidad. Si aquí pudiéramos decir lo mismo de muchos de los que han salido a la palestra no se le daría la más mínima importancia a este blog ni a sus comentaristas. Hay que estar muy seguro de uno mismo para ir de chulo por la vida.
A ver, jovencísimos,
ResponderEliminarBuenos días. Vengo a aclarar un par de puntos en este blog infame, que desde ya podéis ir cerrando.
Quiero que sepan que avalo todas las publicaciones de Alpha Decay, modernos, modernillos, Contextos, Periferias, Mondadori, Anagrama, Barataria, Lunas, Follarás y etc.
Sepan vosotros que si yo no las avalase, no se movería ni un dedo o ápice en el mundo editorial de habla hispana. Y que lo sepan, ¿acaso no recordáis que soy el tercer nobel de habla hispana vivo?
No se movería ni un dedo, mis gigantes.
Y a los zarrapatrosos del Nuevo Drama, jamás. Habéis oído? Jamás.
Así que pueden ir cerrando este blog infame.
Atte
Mario Vargas Llosa
Y en el otro extremo tenemos a la Nothomb, discreta y tímida como una ratita, que a lo tonto logró que su libro fuera lectura obligada en todos los institutos de bachillerato franceses. Paradojas.
ResponderEliminarCon esto lo que quería decir es que los éxitos de ventas van más allá de la opinión pública. Estos dos autores han hecho correr ríos de tinta sobre sus actitudes en los medios, pero nadie puede negarles que tienen una cierta calidad literaria. Si un escritor es bueno, vende aunque se le critique hasta la saciedad o se le alabe en todas las revistas de tendencia, y lo mismo pasa al contrario. Al final, lo único que cuenta siempre es la obra.
ResponderEliminarEstimado Amores,
ResponderEliminaralgunos pensamos que usted es un porcentaje de este Tongoy. Da igual, a los efectos.
Parece que al final lo que más duele es que la gente se lo pase bien con esto, si miramos el número de visitas y posts.
Los blogs más o menos oficiales de critica tienen tres o cuatro comentaristas habituales, tipo "gracias por la visita, me ha gustado mucho". Y ya. Alguien ha determinado en algún Congreso Eucarístico sobre Blogs que tengan que funcionar de tal o cual manera? claro, todos queremos lo mismo: ser objeto del deseo universal. Y una vez conseguida la parroquia, moderar comentarios. Que se queden sólo las tias buenas. La democracia universal de los Anónimos ha hecho mucho bien, sólo puedo decir eso. Ha destrozado los narcisismos galopantes de más de una reina mora que aspiraba al cetro. Mejor cien anónimos volando, que un logado en mano. Pues se olvida un hecho elemental del discurso: los anónimos no son tales, todos somos entes de ficción.
En cuanto a usted, agradecerle una reciente entrada sobre Foster Wallace, en la que remite a un magnífico reportaje del N. Y. Times sobre las relaciones entre Wallace, Franzen, Eugenides, et cía. De lo mejor y más clarificador que he leido hace tiempo.
Larga vida a Tongoy. Viva el mal, abajo el capitalismo literario internético.
Rosita Übermayer, secretaria del Dr. Jacques.
Otro libro que me ahorro que habiendo tan buenos y tan poco tiempo para leer no es caso de perder ni euros ni minutos.
ResponderEliminarComo curiosidad, cuando más malo ( o menos bueno) se dice aquí que es un libro, más comentarios.
Carme
Alpha Decay era otra cosa, antes, hasta que llegó la Pareja con sus gafas de pasta y sus estupideces posmodernas.
ResponderEliminarcada vez lo tengo más claro, en este blog siempre comentamos los mismos, y aunque no lo parezca somos pocos: los marquez, olmos, ibraines, lunas, nuevodramaticos, sargentos, nocillos, mamajuanos, alvys, amores, y algún que otro tonto despistao, como yo, al que le llega la onda y se deja llevar por la curiosidad y la bilis. fracasados, losers, segundones, eso es lo que somos todos los que nos metemos aquí. y en mi caso a mucha honra. viva segovia!
ResponderEliminarEsto ya es lo último: "JL un porcentaje de Tongoy"? Y eso que se supone que significa? No me jodan: paso de ser Amores. Yo soy mucho más joven.
ResponderEliminarEl tema de los anónimos está bastante claro: resaltar su lado salvaje y ofensivo para que no se escuche la parte interesante de lo que dicen, que la hay. Esto no quiere decir que ahora me gusten los insultos. Sigo soñando con un blog sin ellos. Pero ya no me quejo.
En unos minutos nueva reseña. Esta vez de un libro que me leí enterito y sí me gustó. Mucho. Muchísimo. Y no es el de Franzen.
Menudo misterio, Tongoy, qué libro va a ser: pues El afilador de habitaciones. Si le has puesto cuatro estrellas por algo será. Qué listos somos los segundones.
ResponderEliminarYa habrá visto que no. Al afilador de habitaciones habrá que quitarle una estrella o los volverá a ustedes locos.
ResponderEliminarQué bocazas somos los segundones.
ResponderEliminarNo me la das con esa, colega. Escribes sobre “estos otros libros” porque, repito, son lo más parecido a carnaza que hay en el panorama literario vecinal. Sobre los otros te cuesta trabajo escribir y te haces la picha un lío, como bien reconoces, pero no eres una excepción: escribir sobre ellos le es difícil/imposible a TODO EL MUNDO. Qué decir que no se haya dicho ya en superproducciones críticas a niveles de ciencia ficción en cuanto a calidad intertextual, emocional, literaria incluso, acerca de los autores y las obras de siempre. Te contesto: nada. No se puede añadir nada. Y si se añade algo, ese algo será malo, diletante, plagado de adverbios y adjetivos y tan sobrante que la polución se va al minuto de haberla eyaculado y sin inseminar mente alguna. Mejor olvidarlos y ni siquiera leerlos, para qué. La alternativa es lo publicado ahora, el ya rabioso sobre lo que aún no ha opinado nadie. Pero eligiendo con cuidado. Sólo en temas sugestivos como este que te ocupa (no tanto por la Viola sino por la editorial y porque es medio virgen en librerías) se cuela la pandilla coprolálica (las shitleaders de las letrinas literarias que en lugar de menear pompones estrujan poemarios en los que no han sido incluido textos suyos sino, ¡joder!, otra vez los de siempre, ¡nepotismo!, ¡corrupción!, los de esos otros que se hacen fotos con el móvil y las ponen en facebook y dan cuenta detallada de sus vidas vibrantes y divertidas y consiguen transmitir una sensación de movimiento imparable y siempre hacia arriba, más, más, más) que anima a la concurrencia con sus chistes y sus ¡Fuera!, ¡A casa!, ¡Buuuuu!, pero a la que lo único que le pone es enseñar el culo por la ventanilla delante de un grupo de niñas o de viejas beatas. Cuando tocas mejillones o niños feroces la tensión y la atención descienden a niveles de culto dominical matutino en día de carreras. Es decir, ni dios. Por eso eliges Violas y Peces y Elviras y Olmos. Si, como afirmas, mucha (MUCHA) gente pensara como tú dices que piensas (pero no me creo que pienses así, te adelanto) los libros tendrían un precio tres o cuatro veces más alto para poder sobornar a todos los periodistas, bloggers y contertulios idiotas y sin criterio a quienes SÍ les parecen bien y les gustan e incluso celebran las cosas que escriben los generadores de carnaza. Míralo de este modo: si en lugar de a principios del XXI y en España estuviéramos en los treinta del XX y en Inglaterra, lo propio sería despotricar de Virginia Woolf y sus insoportables paridas poéticas, ¿no?; peor si hablamos de Djuna Barnes, aunque esta era americana y no vale; o adelantar un poco en el siglo y mearse de risa con las gilipolleces que publicaba Simone de Beauvoir, aunque ganara el Goncourt (ya sabes, el premio francés amañado, como el italiano Strega que suele otorgarse a escritores indocumentados que previamente han hecho vudú con la competencia o han pagado quién sabe cuánto ni de qué forma). Lo de ahora, Carlos, siempre fue una mierda. Sólo tienes que cambiar de década o de siglo para darte cuenta de que la religión del trendtopic agresivo es más vieja que el oficio y el vicio literario. Lo hemos hablado unas cuantas veces.
ResponderEliminarEl resto me da pereza. Pero 1) sí, Alpha Decay es mía, y también tengo acciones en Mondadori, Anagrama, Libros del Silencio, Planeta (el grupo entero), Tusquets, Alfaguara y DVD, ya sabes, una cesta diversificada para distribuir el riesgo; 2) la novela me ha gustado, ya diré cuánto y por qué sin mentir ni hacer ruido (ahora no tengo tiempo); 3) sí, modero comentarios aunque en realidad no haría falta porque los insultados allí suelen ser los de siempre y ellos ya saben de qué va un asunto que a mí me la trae floja; y 4) es recíproco, no me jodan, paso de ser Tongoy, soy mucho más joven y guapo que él.
El problema de hablar de los clásicos no es que esté todo dicho, pues si son clásicos es porque en cada momento histórico presentan facetas que habían pasado desapercibidas por la tradición. El problema,tal como lo siento en mí, consiste en que para decir algo de "La fontana sagrada", por ejemplo, es necesario contar con recursos expresivos que no están al alcance de los lectores por muy buenos que seamos.
ResponderEliminarY para acabar una pregunta capciosa, dices que te ha gustado el libro de la muchacha, la pregunta es ¿te ha gustado por bueno o te ha gustado porque te han hecho gracia los defectos que has encontrado?
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ResponderEliminar@ Joselu
ResponderEliminarNo creo que la comparación con Woolf sea adecuada; lo sería con algún escritor hoy desconocido porque simplemente no era tan bueno. De hecho, creo que autores como Vila-Matas o Féliz de Azúa son muy valorados.
http://badreviewsofgoodbooks.blogspot.com/2011/03/virginia-woolf-mrs-dalloway_19.html
ResponderEliminarEl virus de los comentarios basura y los tirones de pelos se extiende: http://www.elboomeran.com/blog-post/539/11397/patricio-pron/un-abismo-infranqueable/#comentarios.
ResponderEliminar¡Venga, todos en tromba a rajar al blog de Pron(to)!!!!!!!!!!!!!!
Nehmovich, José Luis Amores y demás latifundistas de los comments: ¡Piedad!
ResponderEliminarMirad tíos, ya vemos que sois unos maestrillos de pueblo de provincia jubilados con una necesidad orgánica por endiñarle la lección a alguien, pero os rogaríamos que nos dejarais un poco en paz, que estamos en el recreo.
Este último comentario es de Juan Sotez Ivars, autor de La chaladura de Pérez-Man.
ResponderEliminarSagaz, muy sagaz.
ResponderEliminarDaniel Nehmovich, te echamos de menos. Deja de corregir exámenes y ¡vuelveeee!!!!!
ResponderEliminarNo sabe qué dices, José Luis, pero ha quedado bien. Largo, pero bien.
ResponderEliminar¿Conocéis este post? ¿Sabéis que es un trepa? Se los dejo:
ResponderEliminarMi nombre es Peón. Quise llamarme Pron, pero sólo me alcanzó para Peón.
Soy trepa y me molan los chavales y escritoras menores de 35: Prontozaurio, Olmedo, Zambrucio, Navarrjuela, AnaDecaya, Apablazoide, Lunática, Pablo Muñozano, Educastrense.
¿Quieres unirte al club de los trepas y los odiamos a todos juntitos?
Contacta conmigo o con SB.
Os esperamos
En mi pueblo a un tipejo de cuarenta y tantos que disfruta insultando y humillando a niñas se le llama de otra manera.
ResponderEliminarYo no veo que Tongoy humille a nadie. Cualquier persona que hace público su discurso se expone a los comentarios.
ResponderEliminarEn general coincido con Tongoy en las denuncias y en los criticados, también en sus críticas positivas. Aún así, pienso que si bien tiene un ojo generoso con el talento extranjero, es bastante cerrado con el nacional: "Habitación Doble", "Hilos de sangre" y "El espíritu de mis padres", sobre todo los dos primeros, son libros enormes.
Mmmmm...háganse mirar lo de los agravios ¿No tendrán un concepto demasiado alto de ustedes mismos?
ResponderEliminarY solo para justificar la afirmación anterior, que decía que no JL no sabe de qué habla, basta con intentar desmontar la demagogia de su discurso.
¿No hay nada más que añadir sobre los clásicos? Mal. Fatal. Por algo son clásicos.
JL,
ResponderEliminarObviando la ironía de tu comentario tengo que decir que no estoy de acuerdo. No en todo, al menos.
De los clásicos se puede hablar aunque sí es cierto que es terriblemente difícil. Pero no imposible. Tienes razón cuando dices que es “imposible” aportar nada nuevo. Al menos en mi caso ni intentarlo. Pero nunca tuve esa intención. Estoy muy lejos de algo así. Mi idea de hablar de los clásicos es por lo mismo que de vez en cuando reseño chorradas: por cambiar de registro. Basta simplemente contar qué tal me lo he pasado. Vaya, que no sé cómo enfrentarlo pero desde luego sí se puede hacer. Si es nada más que por hablar de algo y tratar de pasarlo bien! Estos días estoy liadillo pero cuando levante cabeza hacemos una prueba a ver qué te parece.
Lo de la carnaza… hombre, claro que soy selectivo y muchas veces con “cierta” intención, pero ojo, salvando excepciones, en general a las nuevas hornadas de escritores no les importa demasiado ser citados, aunque sea un poco salvajemente. Lo sé porque de lo contrario a estas altura ya tendría que estar muerto. Me pide el cuerpo hacer un llamamiento a todos aquellos que no quieran ser reseñados en Tongoy. Ambos conocemos el resultado.
Anónimo de las 23:18. Hombre igual alguno sí que se ha sentido humillado (y ofendido) pero la solución para por dejar la literatura y dedicarse a escribir cartas a los amigos. Es que vamos, ahora va a resultar que no se va a poder decir que uno no le gusta un libro por esto, esto o esto otro porque al pobrecito escritor le puede sentar mal. Joder, que ya tenemos una edad aunque sí es verdad que cada vez es menor. Ahora anda Blackie Books (creo) hablando del nuevo fichaje que es un chaval de unos 18 años. Lo vi de pasada, no estoy seguro. Habrá que leerlo. Igual hasta me hace cambiar de parecer al respecto de todo lo dicho hasta ahora.
Con el de Torné no pude, es verdad y el de Magrinya lo empecé sin ganas y lo dejé. No fue culpa suya y de hecho no leí ni treinta páginas pero mi intención es leerlo en el futuro por determinar. Desde luego este año no creo que le toque porque tengo el calendario a reventar. Del de Pron ya he hablado y creo que moderadamente bien. No me pareció la hostia pero de los libros reseñados no está ni remotamente entre los que peor han salido.
Pero sí, es cierto, soy muy crítico con lo nacional.
Saludos,
Hace unos días leí por ahí una de las entrevistas de la niñata esta y le aseguro que para mí ya fue más que suficiente; ni se me ocurrió leer el libro. Es usted muy valiente o muy incosciente -en todo caso, un héroe: le admiro.
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