jueves, 28 de julio de 2011

"Los ingrávidos" de Valeria Luiselli


¿De qué es tu libro, mamá?, me pregunta el mediano.
Es una novela de fantasmas.
¿Da miedo?
No, pero da un poco de tristeza.
¿Por qué? ¿Por qué están muertos?
No, no están muertos.
Entonces no son fantasmas.
No, no son fantasmas.
Llevo una temporada leyendo cosas de lo más extrañas: primero fue una historia sin historia de “Nuestro trágico universo”, luego una novela sin trama, “Alma” y ahora una de fantasmas sin fantasmas. El caso es joder.


Personalmente el Facebook no me acaba de convencer y el twitter menos todavía, a ver si el Google+…. Si uso el primero es simplemente para estar al corriente de las novedades de los unos y para saber de qué pie cojean los otros; el segundo lo miro una vez al mes; con el tercero estoy probando. No acostumbro a ir dejando mis sentimientos, ni mis fotografías, ni mi “estado de este momento” porque no creo que a nadie más que a mi le interese lo que pienso cada puto minuto, pero con esta novela hice una excepción: que yo recuerde es la primera vez que digo públicamente que un libro me está gustando antes de terminarlo, arriesgándome a algún giro imprevisto de la trama o el ritmo que afecte al resultado general y me tenga que tragar mis palabras, que es poco más o menos lo que ha ocurrido en esta ocasión. 

Miren, a mi me pillan ustedes en un día tontorrón y me emociono más que la Pantoja viendo cantar a Paquirrín. Este fue el caso y probablemente por eso, embargado de la emoción, me dejé llevar y publiqué ese comentario tan entusiasta. Esto no quiere decir, ni mucho menos, que la novela, ahora, unos días después, me parezca una mierda. Nada más lejos. La novela me gustó, quizá porque es una novela que apela más a los sentimientos que a la inteligencia y ante eso no hay raciocinio que valga; es como no querer llorar viendo E.T. pero no poder evitarlo. (De la novela) me gustaron especialmente las conversaciones con los niños, quizá porque soy padre; también me gustó ver como la protagonista miente sobre detalles de su vida privada y cómo afecta esto a quienes la rodean porque no hace nada que me acabe un par de libros de la saga Zuckerman de Philip Roth que trataban precisamente ese mismo asunto. Esto fue lo que más: ver crecer una novela (la que escribe la autora, la que tenemos en nuestras manos) y darse cuenta de lo sencillo que es empañar de ficción la realidad hasta volverla irreconocible con unas simples pinceladas; asistir al desconcierto de los demás y ver cómo crece esa duda sembrada acerca de si tuvo lugar o no tuvo lugar aquello que esta desconocida que duerme conmigo escribe cada noche en su portátil. Un poco, ya saben, lo que acabo de mencionar del síndrome Zuckerman que tan ejemplarmente trató Philip Roth y que pueden leer en el recopilatorio “Zuckerman Encadenado” de Seix Barral (aprovecho así para recomendarlo y evitarme tener que escribir la reseña). 

Cuando un libro se entrelaza tanto con la vida privada y los gustos particulares de uno no hay forma humana ni divina de evitar que se desvelen las simpatías que hasta hacía unos minutos dormían plácidamente en la habitación de al lado, no porque yo haya escrito un libro sobre mi vida y haya padecido las consecuencias, sino porque desde este mismo blog incluí en el pasado algunas ficciones que hubieran podido pasar por verdad y así lo creyeron algunos. Esto no es una disculpa, solo quiero que entiendan, antes de gastarse el dinero por mi culpa, que cuando yo interrumpo su sueño para contarles que estoy leyendo una novela que me gusta mucho muchomucho estoy simplemente leyendo una novela que me gusta mucho muchomucho y no leyendo una novela que buenísima buenísimabuenísima. 

Pero lo que tiene cara también tiene cruz. La que viene a continuación es la parte de la reseña que menos gracia le va a hacer a Valeria Luiselli:

Me sobran los fantasmas, por ejemplo. Al final, con la tontería, ya ven: me cargo lo más importante. También me sobra la el excesivo protagonismo que se le da a la historia del poeta en la segunda parte. Más de lo mismo. Me quedo, de quedarme, con los motivos de uno y la intención con lo otro. Como “Los muertos” de Carrión: una buena idea mal envasada. Sospecho que Valeria Luiselli ha querido meter demasiado contenido en demasiado poco continente: 140 páginas no son suficientes para hablar de la falsa muerte de los vivos; de la falsa vida de los muertos y de la ficción acabando con la realidad, superándola. Plagarlo de pequeñas historias, personajes, distribuirlo todo en dos líneas temporales (tres, sin contamos la del poeta sobre el que escribe la protagonista) y salpicarlo intermitentemente de líneas de diálogo no es moco de pavo; como tampoco lo es sacarlo adelante con éxito. Creo que Valeria no acaba de conseguirlo aunque ha estado bastante cerca. El ritmo de la segunda mitad se resiente demasiado respecto del [ritmo] de la primera, que puede presumir de excelente. 

Al final la novela deja un buen recuerdo, un regusto agradable, la sensación de no haber perdido del todo el tiempo, las ganas de seguir la trayectoria de esta mujer pero también la pena de haber estado tan cerca (es un decir) de haberla encontrado, ya saben, a la joven promesa que cada editorial asegura ocultar. Otra vez será. O no. Veremos.



34 comentarios:

  1. La foto de la portada de tu blog es muy bonita, ¿es tu familia?

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  2. dejandome llevar por la imaginación yo les veo, a los de la foto, un parecido con los alemanes de la república de Weimar y las películas de Fritz Lang sin llegar, pero acercándose, a La parada de los monstruos.
    Curioso como soy me gustaría saber tanto el origen de la foto como el defecto óptico que lleva al anónimo anterior a perderse en los cerros del chiste sin gracia

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  3. Enhorabuena por lo de El cultural. Coincide con el twit de Olmos: "Top15. Así las cosas, el más meritorio figurante de la lista es La medicina de Tongoy, de largo. Él ni siquiera ha votado".

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  4. Carlos, te felicito por la mención de Tongoy en el top de El Cultural –menudo lametón te ha pegado Olmos, chaval–; la noticia me ha alegrado la mañana. Ese Peón!!
    Coincido en parte con lo que dices del libro de Luiselli, escritora a tener en cuenta. Ya sé que no lees poesía; si por casualidad eres víctima de un arrebato lírico, te recomiendo algún poema de Gilberto Owen.
    Me piro de vacaciones con el deseo de que I. B. y tú os deis un besito (en la mejilla) y se acaben ya las paridas. ¿Es eso posible?

    Lo dicho: enhorabuena
    (y abrazo)

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  5. El origen de la foto no tiene historia. Lo vi en el blog de constatacionbrutaldelpresente, que a su vez lo extrajo de aquí: http://darksilenceinsuburbia.tumblr.com/post/1702211118/gottfried-helnwein

    LA foto es heavy metal. Yo me quedé sólo con una parte.

    Si es o no mi familia no lo sé. Uno nunca puede estar seguro de sus orígenes.

    Gracias por el aviso de EL CULTURAL. Precisamente hoy se les había agotado en el kiosko -espero que no fuese por mí- y tardé bastante en encontarlo.

    CADOU, a mi la mañana me la ha alegrado tu visita. Me anoto eso de Gilberto, ya veremos qué ocurre. REspecto a Ibra, no temas, no hay muchos que le quieran tanto como yo. Lo de los besos ya no sé, así en la distancia el amor carnar es más difícil de consumar. Que tengas unas felices vacaciones. Un abrazo,

    Gracias a todos por pasar,

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  6. Muchas felicidades, Carlos.
    Como en todas las listas hay bodrios insufribles, ausencias injustificables y grandes aciertos como tu blog.
    A disfrutarlo.
    Saludos

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  7. Tiremos confeti y démonos varoniles abrazos.

    Después de tanto tiempo haciéndonos el vacío, ahora somos todos amiguitos.

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  8. Gracias Juan.

    Anónimo, defina "todos". No vaya a ser el demonio...

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  9. Caduco: el día que Peón celebre amistad o reunión con el tal Abdullah Ibrahim (el elegido por los dioses.., porque otra noticia no tenemos de dónde le nacen tales ínfulas, a menos que fuera encontrado ya púber en el río Manzanares, a su ficticio paso por Puerta de Toledo, en una cesta de mercadona a la deriva, cual Moisés...), algunos dejaremos de fiarnos de la independencia de criterio.
    Es cierto, según lo aqui comentado, que igual los últimos desplantes son una probatura de nuevas estrategias de marketing y ambos los dos se lo habrían pasado en grande.
    Pero, ya digo, el mayor problema del asunto, reside en la tontuna ebriedad erotomaníaca del tal Ibrahim Antonio; para ir por la vida (aunque sea en formato digital...) con esos aires de grandeza, y considerándose una lumbrera, una de dos: o eres la mismísima Emperatriz de las letras, o bien se ha parido un genio, tipo Levi Strauss, Jakobsen, no sé, alguno de esos. Pero más bien parece hecho con una mano de arcilla del Vicente Luis Pacheco Matador Mora (ego sobre todos los egos).
    En célebre canción del uruguayo Martin Buscaglia, "la vanidad es muy mala dieta para amar".
    Y para escribir, ni digamos.
    A los alba cromm/exhumación de turno me remito.

    Valeria Bertolucci, top model.

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  10. Bueno, al menos cerró el así llamado fight blog –irrisorio origen de esta también irrisoria peleíta– y no ha vuelto a piar sobre el asunto. Es verdad que lo hizo cuando quiso, pero zanjó el tema con un gesto de admisión implícita de que había cometido un error. Me refería exclusivamente a eso. No creo que sea una persona con ínfulas. Me importa más bien poco, o nada, si lo es. Me limito a leer sus textos, que a veces me interesan.

    Alba Cromm es muy mala. En eso estamos de acuerdo.

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  11. Cadou: el fiht blog fue una fiesta de las más grandes, a menos que alguien pretendiera tomárselo en serio. Las intenciones de los sujetos no eran demasiado buenas: reirse de los llamados Anónimos, tenerlos controlados, darse un baño de egos. Les salió rana. Sí, lo cerró. No sin antes censurar comentarios, y hacer algunas cosas feitas, como el episodio Peón. Pero vamos, que si es por cachondeo, que lo vuelva a abrir. El chico intentó autobombo, crear un fenómeno, y tal y tal y pascual. Lo próximo será ver a la parejita lunera encerrados en una caravana transparente, durante un mes, en la plaza de España, junto a la estatua de Sancho y su borrico.

    En el fondo, esto no va de Abdullah sí/no. Creo que en eso estamos de acuerdo. Esto va del nivelón cultural que manejamos en Españistán. Es decir, este blog me parece un espacio abierto, por diversos motivos. La inclusión en la lista del Cultural, no sé si motivo de alegria, sobre todo si te colocan junto a Muermo Molina (mal fario). Ahora, tu ves los que han votado eso, y te das cuenta que aqui la cultura es un rancho de cuatro gatos. Los que pueden, colocados en el Cervantes: adsl gratis y buenos euritos. Cling, cling caja. La buena noticia es que no le preguntaron a Rodrigo Fresán. Porque, Rodrigo Fresán existe,...no?
    Dios mío, no, no puede ser. Han preguntado a Carlos Salem.., el promotor de Lunitas. Aghhhhh...
    Fernando Aramburu, Milo Krmpotic, Luna Miguel, Javier Calvo, Elvira Navarro, Álvaro Valverde, Alberto Olmos, Antonio Rivero Taravillo, Carlos Salem, Juan Carlos Márquez, Luis Artigué, Lorenzo Silva, Fernando Valls, Ignacio del Valle, Manuel Vilas, Juan Carlos Méndez Guédez, Carlos Marzal, Arcadi Espada, Laura Fernández, Vicente Luis Mora, Juan Francisco Ferré, Rafael Reig, Pilar Adón, Marta Sanz, Patricio Pron, Sergi Bellver, Eloy Tizón, Eugenia Rico, Mercedes Cebrián, José Antonio Millán, Jorge Carrión, Félix de Azúa, Isaac Rosa y Francisco Ferrer Lerín.

    Ahora, la lista buena, la da en las primeras páginas el J. Palomo. La lista de libros más robados en las bibliotecas de los USA. Bukowski, Burroughs, Kerouac... Vaya, que sorpresa. No roban ninguno de la lista Granta, ni del Gaviero. Ummmm....

    Valeria Bertolucci, top model de la alta cultura.

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  12. Señor Peón, su blog es mejor que el de Lector Malherido de aquí a Lima. Lo peor que puede pasarle (a su blog) es que Olmos se dedique a elogiarle. En realidad, lo peor que puede pasarle es que salga en El Cultural y que haya consenso en los elogios. Pero bueno, ya que esto ha sucedido, disfrútelo.

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  13. Definición: "todos" son esos prohombres de nuestras letras. Señores. Que expiden los certificados de lo que vale y lo que no en la literatura de la red.

    Ahora reparten palmaditas condescendientes.

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  14. Anónimo de ayer (20:06):
    1.-Intento no juzgar a las personas si no las conozco, eso es todo. Ahora bien, si me planteas la cuestión I. B. en términos de sí/ no, yo diría que sí.
    2.-Muchos de los autores que mencionas en tu extenso comentario me parecen escritores respetables; algunos de ellos (Muñoz Molina, Pron, Cebrián, Ferré, Olmos, Vilas, Reig, Rosa, Ferrer Lerín y Azúa) me parecen incluso interesantes. Tal vez lo que me pasa es que soy un poco subnormal y no me he dado cuenta todavía de que España es un erial literario.
    Lo pensaré.
    Un saludo.

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  15. Ni salir en El cultural ni en la Que leer es malo. Lo malo sería creerse que eso cambia algo. En cualquier caso uno escribe con la esperanza de ser leído y saber que es así siempre es agradable. A nadie le amarga un buen dulce.

    Anónimo de las 21:18. Entendido. Son muy majos, sí, todos. EStoy pensando en leerme de aquí a fin de año un libro de cada uno.

    Saludos,

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  16. Cadou: sólo una aclaración elemental. Nadie está juzgando a las personas, aunque sería interesante aclarar qué esencia última sería eso de "personas". Ni conozco "personalmente", ni me despierta la mínima curiosidad el tal Abdullah. Para mí es tan anónimo como si firmara Fernando Octavo.
    Estamos siempre hablando de lo que se escribe, publica, critica, etc. Es evidente que los escritos traslucen algo "personal" de cada quién, y de su manera de relacionarse con los otros, y con el mundo. Incluso del lugar que esa persona que escribe se sitúa en relación con el mundo. El mundo que tiene cada quien en su cabeza, la representación del mundo.
    En ese sentido, señor Cadou, lo personal e intransferible de ese grupete de gentes que a veces se mencionan, es una total falta de humildad y de honestidad. Al tiempo que unas muy grandes expectativas de notoriedad.
    Ya digo, vanidad de vanidades.
    Egos precocinados, no en la vida y en las experiencias reales, si no en las muchas horas en la pantalla digital.
    Pero egos, en cualquier caso, inflamados.
    Y al tan mencionado hijo de Mahoma, ni nombrarlo, que de eso se trata al fin en la era del taolinismo desilustrado: que hablen de tí, aunque seas una marca de cereales.

    Valeria B., servidora.

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  17. Eh, anónimo, no hay huevos para llamarme prohombre en la calle.

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  18. Vale, Anónimo, pero... ¿no has pensado alguna vez que no es saludable prestar tanta atención a lo que te disgusta? En cualquier caso:
    "¿Para qué afanarse en estériles luchas, si al final del camino se encuentra como todo premio un sepulcro profundo y una nada infinita?"
    (Roberto Arlt, "El jorobadito")
    Saludos, hablamos en otra ocasión (me tengo que ir ya)

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  19. Ah, que no se puede hablar de las cosas porque al final todos terminamos en el asador. Vale.

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  20. Cafou, como puedes decir que Alba Cromm es mala cuando te dedicas a elogiar Habitación Doble-Caca, Hilos de caca y El espíritu de la caca... Venga ya, hombre, más Carrión y menos snobismo.

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  21. "¿Cómo puedes decir que Alba Cromm es mala?"

    Diciéndolo, sin más. La compré, la leí y no me gustó nada, eso es todo.

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  22. Por cierto, el post va de Los Ingrávidos. Esta novelita merece que se le preste más atención. Hay pocos libros tan pedantes y pretenciosos. Encima, al final, no se entiende nada. Ideal para espíritus esnobs incapaces de aceptar que lo que están leyendo les aburre, sólo porque Vila-Matas lo ha recomendado.

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  23. No creo que el libro sea ni pedante ni pretencioso. Me lo pasé muy bien con el retrato de Lorca, "el españolet". Peca, eso sí, de ternurismo en los fragmentos de los niños.

    Por supuesto, prestemos más atención a Los ingrávidos:

    "El problema con los criollos (...) es que están convencidos de que merecen una mejor vida que la que tienen. La mente criolla está convencida de que bajo la corteza del cráneo porta un diamante que alguien tendría que descubrir, pulir y poner en un cojín rojo, para que los demás se admiren, se pasmen, se den cuenta de lo que siempre se habían perdido"
    (Los ingrávidos, p. 77)
    [N. B.: sustitúyase "criollo" por "escritor españolet que cree haber descubierto el mediterráneo"]

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  24. Y eso te divierte? Nivelón.
    Los ingrávidos: un gran título, una gran portada, y una gran foto de solapa. Lo de dentro? Yo no me pronuncio hasta que la santifique Vicentito L. Mora.
    Faltaría más.

    Respecto a tu pregunta, Cadúco: dedicamos tiempo a eso, porque nos gusta y porque nos divierte. Sin más. Ni siquiera hace falta comprar el libro.

    La pregunta es: cómo es que dedicas tanto tiempo tú a hablar y a defender al tal sujeto? Ummm. Doppelgänger. Desdoblamiento?

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  25. Mencioné ese tema en una línea que no iba dirigida a ti. Saliste con comentarios kilométricos a los que estimé conveniente responder precisamente porque había sido yo el que mencionó en tema en primer lugar –sin dirigirme a ti, insisto–, de modo que no me vengas con gilipolleces de doppelgänger o cosas por el estilo.

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  26. Abdullah/Cadú: esto es el nuevo fight-blog?

    Qué guay!

    Cuando salen los resultados?

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  27. Anónimo, eso de ir soltando palabrejas en otros idiomas es una pendejada si es innecesario o carece de gracia, pero, sobre todo, es una pendejada.

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  28. los resultados están claros, anónimo
    el anónimo es un resentido más, un tueste de tío
    el caduco es un tipo curioso, se ríe de todo y de todos
    queremos más sangre!!!

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  29. Tenga cuidado, Tongoy: se le está llenando el blog de caducos resentidos y pendejitos abdullahs.
    Los grávidos quiméricos del botellón han vuelto.
    No tiene dinero para irse de vacaciones.

    Honimori malquerido.

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  30. Honimori, sí, a mi también me parece que Caduco tiene algo con el Ibrahim, quiere ser como él o algo. Me comentan que se llegó a apuntar al curso de crítica literaria en Fuentetaja, impartido por el gran maestro. Tuvo que ser suspendido por falta de fans. Qué cosas.

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  31. lo que ves, querida
    lo que ves
    es lo que
    es

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  32. Hace tiempo leí una opinión de la top model sobre la malhadada e ignorante labor de los bloggers. Solo he podido localizar una acertada respuesta (a mi modo de ver): http://registropersonal.nexos.com.mx/?p=2945
    Que el Santo Niño de Atocha me perdone por andarme metiendo en estos berenjenales. No he leído la obra porque su reseña me dejó sin ganas, esperaré a ver si nos cuenta algo del nuevo libro de los dientes.
    Grazie.

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